Redacción Central, 20 oct (PL) En medio de fuertes tensiones políticas y una crisis de seguridad, las autoridades paquistaníes buscan hoy a los responsables del reciente atentado suicida contra la ex primera ministra Benazir Bhutto.
Medios periodísticos nacionales confirmaron que la líder del opositor Partido Popular Paquistaní (PPP) entregó una lista de sospechosos del ataque que causó 140 muertos y más de 500 heridos.
El presidente Pervez Musharraf, quien llegó al poder tras un golpe de Estado hace ocho años, se comprometió ante Bhutto a detener a los culpables, aunque le rogó que se abstuviera de "acusar a unos y otros" sin pruebas.
Hasta ahora se desconoce quiénes integran la relación.
Miembros del PPP afirmaron a la cadena BBC que la lista contiene los nombres de "importantes responsables del Ejército".
La otrora jefa de gobierno aseguró haber recibido amenazas de militantes islámicos de que su bienvenida al país, después de casi nueve años de exilio voluntario, iba a estar acompañada de ataques suicidas.
Entre los nombrados por Bhutto podrían figurar simpatizantes de la resistencia afgana, tanto paquistaníes como del vecino país.
También aparecería en la nómina una organización de combatientes integristas con sede en la meridional ciudad de Karachi, donde ocurrió el atentado, el más sangriento de la historia de esa nación asiática.
Ayer el esposo de Bhutto acusó desde Dubai, Emiratos Arabes Unidos, a una agencia de los servicios de inteligencia del gobierno paquistaní.
Por su parte, la policía difundió el retrato de uno de los presuntos autores de las explosiones, perpetradas cerca de un vehículo blindado en el que la ex primera ministra desfilaba para celebrar su regreso al país.
La cadena de televisión privada Geo Tv, citando a una fuente policial, refirió que las fuerzas de seguridad retrataron la cabeza de uno de los presuntos suicidas, que fue encontrada -seccionada del resto del cuerpo- en el lugar del hecho.
En este contexto, la líder opositora, que vaticinó más acciones como esa, solicitó al Ejecutivo más medidas para su protección.
"Veo el atentado no como un ataque contra un individuo, no como un ataque contra mí, sino contra lo que represento. Fue un ataque a la democracia, a la unidad e integridad de Paquistán", declaró.
Bhutto, de 54 años de edad, dirigió el gobierno del país en dos ocasiones (1988-1990 y 1993-1996). En ambas fue destituida bajo la acusación de corrupción, lo que la obligó a huir en 1999 para evitar ser procesada por malversación de fondos públicos.
La hija de Zulfiqar Ali Bhutto, un político paquistaní ahorcado por un general en 1979, retornó ahora amparada por una amnistía, decidida a "restaurar la democracia".
Sus intenciones son las de lograr por tercera vez el cargo de primer ministro en una alianza con el general Musharraf, apoyado por Estados Unidos y Gran Bretaña, afirman analistas políticos.
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