Una imagen de un presentador apareció en las pantallas gigantes y anunció que el concierto de Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina estaba cancelado por quebrantos de salud de los artistas.
No hubo tiempo para que el público reaccionara. Serrat y Sabina aparecieron en el escenario y empezaron su gran noche en Bogotá.
Y lo hicieron con una de las canciones más conocidas de Serrat: Hoy puede ser un gran día, en una versión más rápida y con toques de rock.
Y de hecho fue una gran noche, en la que el público cantó los temas de este par de españoles que se juntaron para ofrecer por el mundo hispano su espectáculo 'Dos pájaros de un tiro'.
También, para las bromas. Serrat comentó que este podría ser el último concierto de Sabina y este le respondió que lo mismo le podría suceder.
E incluso para volver al pasado, cuando en escena apareció una cámara fotográfica antigua. Sabina la tomó y le dijo al público que le iba a hacer una foto. El flash estalló y en las pantallas aparecieron imágenes fijas de los asistentes
Ocho músicos les ayudaron en el juego de hacer un gran espectáculo. Y hubo tres canciones que consiguieron el delirio total: 19 días y 500 noches, Mediterráneo y Penélope.
También, un grito emotivo: "Viva Colombia, carajo", salido de las gargantas de estos músicos que actuaron durante más de dos horas y media, sin receso. En el cierre y vestidos de piratas, cantaron Lucía y La del pirata cojo.
Los artistas eran aclamados por los asistentes, por lo que debieron regresar al escenario dos veces luego del anuncio del final del evento.