SANTO DOMINGO.-El presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) ingeniero Ramón Alburquerque, consideró que los jueces de la Junta Central Electoral (JCE), deben actuar con tolerancia y respeto mutuo, a fin de disfrutar del respeto de la sociedad tan necesario para alcanzar una mayor legitimación institucional
Entiende el dirigente político que la descalificación recíproca constante, entre los mismos miembros de la JCE, les conducirá al total descrédito, poniendo en peligro el proceso comicial que habrá de elegir el próximo presidente de la República el16 de mayo del 2008.
Recordó Alburquerque que cada uno de los miembros del tribunal comicial fue seleccionado a parte de su probada capacidad técnica profesional, por motivos políticos, lo que no invalida su competencia, siempre y cuando cumplan con la Constitución, las leyes y la ética pública.
Señaló que las reiteradas confrontaciones entre los magistrados del tribunal electoral, solo traerán mayores contradicciones internas, a parte de que, tan pronto la sociedad detecte su condicionalidad a los propósitos reeleccionistas, les retirará su confianza en forma definitiva.
Confiamos en que dichos jueces evitarán por todos los medios retornar al país a las antiguas crisis institucionales que se entienden superadas definitivamente, expresó el presidente del PRD.
Entiende asimismo, que la Resolución que prohíbe la promoción de candidaturas atenta contra los derechos individuales y colectivos consagrados en el marco jurídico del país, desborda la capacidad legal de la JCE, y, en adición, resulta extemporánea, al oponerse a costumbres imperantes por mas de treinta años.
Estimó evidente que esta resolución procura complacer a los designios del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y al plan reeleccionista de Leonel Fernández Reyna, con un extraordinario parecido, en su intención de complacer al candidato Leonel Fernández, a la sentencia del caso Baninter.
Sostiene sin embargo, que el PLD parece contradecirse nuevamente porque hace unos días anunció su rechazo absoluto a la referida Resolución, y ahora, cambia de opinión, al condicionar su acatamiento.
Apuntó que los honorables magistrados están frente a la conciencia de un pueblo que desea elegir libremente, evaluando las propuestas de los distintos partidos y sus candidatos.
"Es preciso que la JCE entienda que la nación observa sus movimientos internos donde se originan innumerables sospechas a nivel de las oficialias, de las juntas municipales, de los nombramientos de personal, en cuanto a los métodos de cómputos de los votos y su complicada seguridad estratégica" agregó.
Advirtió que "estamos alertas ante tantos yerros y pérdida de tiempo en cuestiones bizantinas, cuando lo que hay que hacer es, montar un proceso jurídicamente impecable, limpio, transparente, y bien supervisado, con el propósito de disipar incertidumbres y garantizar paz a las familias dominicanas.
