SANTO DOMINGO. Con el interés de ampliar los conocimientos, así como obtener mayor formación en el área de la bibliotecología, el Centro Cultural de España está ofreciendo el Curso de Formación para Auxiliares de Bibliotecas, el cual finalizará este viernes 30 de noviembre.
Con la intervención de dos importantes expertos
Centro Cultural de España ofrece curso de bibliotecario
Decenas de bibliotecarios y profesionales están especializándose en diferentes temas desde hace un mes en el CCE
El curso, que se enmarca dentro del programa de Cooperación Cultural de la institución, trazado por su sede central en Madrid, España, y que siempre se encuentra disponible a que sus espacios sean empleados para la sana difusión y formación de nuevos valores culturales, tiene 100 horas de clases.
Es patrocinado por el Centro Cultural de España y la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI). Por lo que se está ofreciendo de manera gratuita, aportando con esto personal con nuevos conocimientos y una actitud reforzada y orientada a la calidad y a la excelencia en el servicio al usuario así como en los servicios técnicos bibliotecarios.
Los expertos bibliotecarios Ricardo Vérges-Vanderhorst, encargados de la Biblioteca del CCE y Maritza Santana, han presentado a la fecha nueve interesante temas, los cuales servirán en la formación de los nuevos auxiliares de bibliotecas.
Entre los temas está “El Libro y la Biblioteca, conceptos, misión, funcionamiento, colección, formación mantenimiento, proceso documental en la biblioteca y servicios a prestar; finalizaran con 4 nuevas tecnologías en las bibliotecas.
En la presentación del amplio programa, Vergés-Vanderhorst dijo que el curso fue concebido para desarrollar habilidades, crear y motivar aptitudes, despertar la conciencia respecto del trabajo bibliotecario, esto basado en la interrelación docente – orientador.
“Aquí lo importante no es el tema 3 o el tema 2; es el conjunto de conocimientos que les estamos aportando a los participantes, así como la forma en que evaluamos su desempeño a través de las prácticas supervisadas, investigaciones de campo y las discusiones que generamos en cada clase”, aclara el reconocido bibliotecario.
Aclaro que una buena manera de enseñarles a mantener una excelente política de colección, es trabajando con organización en un sistema de descripción, análisis y registro de los documentos, que constituyan el fondo de la unidad de información.
“Si no se organizan los recursos documentales para su máxima y eficiente recuperación y aprovechamiento; todo este trabajo previo, e incluso la integración y explotación de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación, unidas a las necesidades de los usuarios, a los propósitos institucionales, al apoyo moral, económico y logístico de la gerencia y a la creatividad de los funcionarios y técnicos bibliotecarios, forman parte del entramado que ha de permitir el diseño de servicios que respondan a esas necesidades y que generen la aceptación, la confianza y el apoyo de los ciudadanos a la biblioteca”, garantizo Vérges.
Agrega que tratan del que grupo, además recibir una orientación técnica – bibliotecaria personalizada, se encamine a identificar su vocación para este trabajo y asuma su compromiso con la comunidad y el País; procurando formar conciencia profesional y social, que reconozcan que el curso es sólo una base, el inicio de una interminable carrera de aprendizajes.