KAMPALA, 22 nov (IPS) – La crisis política en Pakistán y las negociaciones multilaterales de comercio dominan la agenda de la cumbre de la Mancomunidad Británica de Naciones (Commonwealth), que comenzará este viernes en la capital de Uganda. La conferencia de jefes de Estado y de gobierno, que concluirá este domingo, reunirá a líderes de los 53 países que integran la Commonwealth, una alianza entre Gran Bretaña y buena parte de sus ex colonias que promueve la gobernanza y el desarrollo económico.
El secretario general saliente del bloque, Don McKinnon, llamó a Estados Unidos, Europa y Japón a remover los subsidios agrícolas, que, según él, se han vuelto un obstáculo para el desarrollo del Sur.
"Si estás realmente preocupado por la pobreza en África, sácate de encima tus subsidios agrícolas. Si África produjera bienes agrícolas y los exportara a Europa sin barreras, podría combatir la pobreza", afirmó McKinnon el miércoles, ante periodistas de África y el Caribe.
"La idea es librar a todos los países de subsidios. Debería haber un campo de juego nivelado", agregó.
El llamado a la remoción de los subsidios, una cuestión espinosa en las negociaciones comerciales, tiene cada vez más apoyo.
"Los subsidios agrícolas europeos están destruyendo el sustento de las familias de países en desarrollo. Al alentar la sobreproducción y el dumping de exportaciones, aplastan los precios mundiales de productos clave como el azúcar los lácteos y los cereales", sostuvo la organización humanitaria de origen católico Oxfam Internacional.
Organizaciones de la sociedad civil también consideraron que el comercio justo es importante para ayudar a los países del sur a alcanzar los Objetivos de las Naciones Unidas para el Desarrollo del Milenio, en especial a los de África, que están muy rezagados.
"Hubo algunos avances, pero no son suficientes. Muchos hombres, mujeres y niños aún mueren de sida y no tienen acceso a tratamientos antirretrovirales", dijo Kumi Naidoo, secretario general de CIVICUS, alianza internacional de organizaciones no gubernamentales.
El Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre VIH/Sida (Onusida) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó esta semana que 5.700 personas mueren todos los días como consecuencia de la enfermedad, mientras 6.800 personas contraen el virus de inmunodeficiencia humana que la causa.
La mayoría de los 33,2 millonesa de personas que viven con el VIH residen en África subsahariana.
También la falta de acceso al agua y al saneamiento es causa de preocupación.
Ana Tibaijuka, subsecretaria general de la ONU y directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas sobre Asentamientos Humanos (Hábitat), consideró que solucionar estos problemas permitiría, además de cumplir con el séptimo objetivo del milenio, avanzar en otros.
Según la ONU, 327 millones de habitantes de los países de la Commonwealth viven en asentamientos irregulares, sin acceso a servicios básicos de saneamiento. Las niñas del más grande de África, el de Kibera, en Nairobi, pasan cuatro horas al día acarreando agua.
En Uganda, país anfitrión de la cumbre de esta semana, muchas mujeres mueren por complicaciones vinculadas con la gestación y el parto. Algunas deben caminar largas distancias para asistir a un hospital.
Ochocientas ochenta ugandesas mueren en el embarazo o el parto por cada 100.000 nacidos vivos. En Suecia, por ejemplo, mueren apenas dos.
"Hay cada vez menos confianza en los gobiernos por el cumplimiento de los objetivos de desarrollo del milenio. Si el gobierno no logra avanzar en ellos, la confianza se socavará aun más", afirmó Naidoo.
Pero algunos gobiernos aseguran carecer de fondos suficientes para cubrir las necesidades sociales, aunque pierden montos importantes a causa de la corrupción.
La encargada de abrir la cumbre de la Commonwealth será la reina Isabel de Inglaterra, quien visitó Uganda por última vez en 1954.
Los participantes en la reunión se dedicarán a analizar la situación en Pakistán, cuyo presidente, Pervez Musharraf, decretó el estado de emergencia a comienzos de mes. Miles de activistas, dirigentes opositores, abogados y periodistas han sido detenidos en el país, y numerosos jueces fueron destituidos.
Pakistán corre el riesgo de ser suspendido de la Commonwealth por segunda vez si Musharraf no deja sin efecto el estado de emergencia, restaura el estado de derecho y la independencia judicial, libera a los detenidos garantiza la libertad de prensa y renuncia a su cargo de comandante del ejército.
Los cancilleres de la Commonwealth trataron el caso entre el miércoles y este jueves.
Musharraf solicitó al bloque, supuestamente, que retrase cualquier sanción. La primera suspensión de Pakistán, entre 1999 y 2004, cuando el actual presidente se encaramó en el gobierno mediante un golpe de estado.
Zimbabwe no integra la Commonwealth desde 2003, pero la difícil situación política, económica y social en ese país también será motivo de discusión en Kampala. (FIN/2007)