Los últimos descubrimientos presentados a la American Society Sciences, de los Estados Unidos, proviene de un estudio realizado a 321 mujeres jóvenes, entre las edades de 9 y 14 años, y fue conducido por Rachel Novotny y otros médicos de la Universidad de Hawai.
Se observó que las que consumían más calcio, pesaban menos y tenían menos grasa abdominal. Esto se debe a que el calcio aumenta la habilidad del cuerpo para romper la grasa. Pero no significa que hay que empezar a tomar leche y comer queso sin control, porque las calorías también cuentan.
La mejor manera de mantenerse delgada es comer menos y ejercitarse más.
Y recuerda que los productos lácteos bajos en grasa son ricos en calcio, lo mismo que el bróculi, las nueces, los frijoles y las sardinas.