Solamente en Colonia, donde se celebra el carnaval más famoso de Alemania, se concentraron 1.2 millones de personas desafiando a la lluvia para ver o participar en el desfile de siete kilómetros, informaron los organizadores. Entre otros temas, las carrozas de ese desfile se centraron en el doping, la legislación antitabaco vigente en Alemania desde el 1 de enero y la polémica edificación de una mezquita en Colonia.
Del mismo modo, en la vecina ciudad de Düsseldorf, localizada también en el estado federado de Renania del Norte-Westfalia, miles de personas participaron en los tradicionales festejos del carnaval.
Un lugar especial ocuparon las polémicas elecciones regionales en el estado federado de Hesse el pasado 27 de enero, donde ninguna de las coaliciones previstas logró la mayoría necesaria para gobernar.
En la ciudad de Maguncia, la suntuosa decoración de las carrozas se centró sobre todo en el tema del cambio climático y la destrucción del planeta: una de ellas mostraba unos pingüinos metidos en una nevera, en la que había un cartel grande donde se leía: ¡cierre la puerta!