El negro, el blanco, el gris, el crema, el marrón y azul oscuro son considerados básicos en un ropero, ya que combinan entre sí y se constituye en un excelente fondo para los accesorios de colores brillantes.
El color que queda más próximo a la cara es el que resalta. Esto lo debemos tomar en cuenta al usar blusas, bufandas (en el caso de las mujeres) y camisas y corbatas (en el caso de los hombres.
CLASIFICACIÓN DE LOS COLORES, SEGÚN EL FENG SUI:
El Feng Sui clasifica los colores dentro de cinco categorías básicas, según los elementos: fuego, tierra, metal, agua y madera. Cada uno de ellos expresa una energía particular, que irradia hacia los demás y hacia nosotros mismos, favoreciendo determinadas actitudes y debilitando otras. Todo es cuestión de encontrar el momento adecuado para cada elemento.
MENSAJES DE LOS COLORES:
Rojo y naranja: El elemento fuego.
Por su connotación de calidez y vitalidad la energía del fuego es expansiva; desmaterializa y expande. Cuando usamos el rojo nuestra presencia se "agranda". El rojo exalta y atrae la atención hacia nosotros; transmite poder e inspira confianza en quien lo porta. En el ámbito laboral debe usarse en pequeñas dosis.
Verde: El elemento madera.
El verde en la moda es siempre un color de transición. Tiende a ser usado poco porque es difícil conseguir el tono de verde adecuado que complemente con nuestra piel sin que la haga resultar amarillenta. Este color sugiere crecimiento, ideas nuevas y originalidad. Hay que preferirlo en ámbitos donde estas cualidades sean valoradas. En cambio, conviene evitarlo donde se necesite proyectar una imagen de solidez, de estabilidad, de madurez y de confianza.
Plateado/blanco: El elemento metal.
El metal puede aparecer en nuestro vestuario en forma de blando o de objetos brillantes. Cuando predomina en la vestimenta proyecta una imagen limpia e induce a los demás a un comportamiento cuidadoso, educado, protocolar y reflexivo.
Negro/azul oscuro: El elemento agua.
El negro, en la moda, resulta el color comodín, pues con todo combina bien y siempre luce fino. Visualmente estiliza, oculta las imperfecciones. Por lo tanto, expresa que deseamos que el otro se acerque, se exponga y "descubra" nuestro mundo interno y el suyo propio. Es un color que lo absorbe todo; es misterioso e induce a los demás a explorarnos, a abrirse, a mostrarse, a confiarnos secretos. Hay que evitar el color negro allí donde necesitemos generar un nivel de comunicación dinámico, franco y abierto.
Amarillo/naturales: El elemento tierra.
El color amarillo ocre y natural suele usarse en los climas fríos para transmitir calidez y bienestar. Resultan tranquilizadores, que expresan permanencia, estabilidad, solidez y apego a lo tradicional. Resultan adecuados para proyectar una imagen conservadora y familiar. Hay que evitarlos cuando se requiera o se pretenda parecer dinámico e innovador.