Las imágenes fueron tomadas antes de que la cantante estadounidense llegara a la ciudad francesa pero dejó al descubierto los caprichos y exigencias a que el hotel ha tenido que someterse para complacer a la diva, como gran cantidad de botellas de agua purificada o un completo equipo de musculación.
Los abogados de la cantante ya se han puesto en contacto con el establecimiento, al que han avisado de que no pagarán la cantidad adeudada, y al que acusan de haber roto el contrato de confidencialidad. El programa que emitió el reportaje fue el Petit Journal People, de Canal +.