Amaral quedó condenada a silla de ruedas el 9 de febrero de 1966, tras resultar herida durante los incidentes suscitados cuando un grupo de estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) reclamaban al gobierno entregar a la academia estatal el subsidio correspondiente y la desocupación de los liceos de parte de las tropas interventora norteamericana.
El Consejo Permanente del CIMUDIS felicitó al presidente de la Cámara de Diputados, licenciado Julio César Valentín, por la iniciativa de proponer la realización de un concurso público, en el cual resultó ganadora la señora Amaral.
La Presidenta del CIMUDIS, Belkis Reynoso Then, calificó la designación de la señora Amaral como un gran paso de avance hacia la presencia los discapacitados en las tomas de decisiones inclusivas y en todas las altas instancias de los principales poderes del Estado y en las políticas que se implementen a favor de ese sector
Asimismo, la señora Reynoso Then expresó su confianza en que la reciente ratificación del Convenio de los Derechos de las Personas con Discapacidad, aprobada por Senado de la República; junto con esa iniciativa de la Cámara de Diputados, permita que las mujeres con algún tipo de limitación física o motora puedan acceder al Congreso Nacional en calidad de legisladoras y que se propicie la previa adecuación de espacios libres de barreras arquitectónicas y de actitudes.