ANTES DE PINTAR:
Asegúrate, antes de comenzar a pintar o reparar una habitación, que todos los muebles, objetos y accesorios de la misma estén perfectamente resguardados de la pintura o material que vayas a utilizar. Plásticos y cinta adhesiva, bien utilizados, pueden salvaguardarte de graves disgustos. ¡Compruébalo todo!
AL GUARDAR LOS BOTES DE PINTURA:
Cuando guardes los botes de pintura, invierte su posición, colocándolos boca abajo, pues de esa forma el interior de la tapa de pintura no se seque y provoque problemas para abrirlos.
ELIMINAR EL OLOR DE PINTURA FRESCA:
La mejor manera de acabar con el olor a pintura fresca es ventilar la habitación; pero si la habitación carece de ventanas o éstas no se pueden abrir y no tiene puertas directas al exterior, puede colocar un plato en el centro de la habitación que contenga agua fría con las rodajas de una cebolla durante un día.
PARA PINTAR DIFERENTES SUPERFICIES;
A la hora de pintar, cada superficie exige unos materiales y técnica distinta. Algunos consejos son suficientes para enfrentarse con éxito a estas labores. Puertas, fachadas, verjas, paredes con textura.. Ponga en práctica estos consejos:
Puertas y rejas de hierro:Las rejas y puertas de hierro del hogar pueden cambiar de aspecto si se pintan de otro color o si, simplemente, se renueva la pintura existente. Hay que comprobar primero si el hierro está oxidado. Si lo está, se lija y se aplica después una capa de minio de plomo. Cuando haya secado, se extiende una capa de esmalte antioxidante para exteriores. En el caso de que no exista oxidación, sólo hay que pintar la superficie con el esmalte especial. El resultado es muy efectivo y duradero.
Puertas a brocha: La mejor solución para restaurar una puerta algo deteriorada es aplicar unas cuantas capas de pintura. Si se utiliza una brocha, los resultados serán perfectos. Antes de pintar, hay que quitar las irregularidades que haya en la superficie de la puerta ya que, de lo contrario, se notarán más. Se rellenan todos los desperfectos y desconchones con pasta para madera con la ayuda de una espátula pequeña.
Cuando el aparejo esté completamente seco, se lija la superficie con un taco de lijar o una lijadora orbital. De esta forma, se eliminan también las irregularidades de las capas de pintura anteriores.
Se debe utilizar pintura resistente, como el esmalte o la laca, ya que la pintura al agua se deteriora con más facilidad. Antes de comenzar, no hay que olvidar proteger el suelo con papeles o plásticos.
Pintar las superficies amplias con una brocha plana, aplicando capas finas y mediante brochazos cruzados (primero horizontales y después verticales, o al revés). En el caso de que la pintura esté espesa, se ha de añadir un poco de disolvente y se extiende bien. Para finalizar, se pintan los bordes y zonas difíciles con una brocha redonda, pero hay que tener cuidado de no tocar las zonas húmedas.
Para pintar fachadas exteriores: Antes de empezar a pintar la fachada, hay que asegurarse de que está bien seca y limpiarla para eliminar los restos de suciedad. De este modo, el resultado será más profesional.
Con el fin de que la limpieza resulte más cómoda, es recomendable ayudarse con un limpiador de alta presión; pero no hay que olvidar que después hay que dejar secar la pared durante unas dos semanas. Una vez pasado este tiempo, se deben retirar los trozos de yeso sueltos y reparar las grietas y huecos existentes.
Se debe empezar a pintar por arriba y en sentido horizontal. Es mejor no pintar la fachada a pleno sol, pues puede ser que la pintura seque muy rápido y se formen pequeñas fisuras.
CLAVES PARA PINTAR TECHOS:
Antes de pintar una habitación, es recomendable proteger los muebles y el suelo para evitar que se ensucien. Si hay que cubrir superficies grandes, se pueden comprar plásticos, de venta en comercios de pinturas, que facilitarán el trabajo.
– Si los techos tienen pequeñas grietas o desconchones, se pueden reparar con un emplastecedor. En el caso de que sean grandes, se rascan y rellenan por completo.
– Remueva la pintura con un palo de madera o una espátula, y empiece a pintar los rincones con una brocha redonda.
Para pintar el techo hay dos herramientas a elegir: la brocha o el rodillo. Si se elige la primera opción, habrá que utilizar una que sea redonda y gruesa, y aplicar la pintura cruzando dos veces y terminando siempre en la misma dirección. Si se va a utilizar un rodillo, no hay que empaparlo demasiado, ya que podría dejar salpicaduras en la superficie. Es aconsejable utilizar un barreño con rejilla de escurrir, y cruzar las pasadas de pintura
PARA PINTAR UNA PARED INTERIOR:
Cuando vaya a pintar una habitación de su casa, recuerde que el techo es lo primero a lo que se debe dedicar. Para evitar salpicaduras y goteos, no empape demasiado el rodillo.
Comience pintando los bordes del techo con una brocha plana, después pase al rodillo. Pinte por trozos siguiendo la dirección de los rayos de luz, es decir, perpendicular a la ventana más luminosa. Es aconsejable que aplique dos manos de pintura; la primera paralela a la ventana; la segunda, perpendicular, así evitará la marca del rodillo.
Una vez pintado el techo, continúe con las paredes, empezando por el marco de la ventana o puerta y a partir de ahí, el resto de la habitación. Las esquinas y los bordes que tocan el techo, debe pintarlos con una brocha. Pinte por trozos, primero de arriba a abajo y luego en sentido horizontal. En caso de que vaya a pintar una puerta, empiece por la parte superior y vaya bajando.
Para pintar una ventana, tiene que cerrarla y comenzar desde el interior hacia el exterior de la misma. Si no quiere manchar los cristales, recubra el borde de los mismos con cinta adhesiva. Luego abra la ventana y pinte el contorno y la parte exterior. Deje que esté completamente seca antes de cerrarla.
En caso de querer pintar los radiadores, recuerde que éstos deben estar completamente fríos. Utilice un pincel especial con el mango largo y curvo para que pueda acceder a los rincones difíciles. Use una pintura especial para radiadores que no pierda calidad con el calor y la humedad.
CUANDO ACABE DE PINTAR:
Cuando acabe de pintar guarde los botes utilizados cerrados y boca abajo, así evitará que se forme una película en la capa superficial. Tanto si están medio llenos como si tienen restos de pintura, debe cerrarlos con la ayuda de un martillo y un taco de madera para no deformar la tapa. Recuerde que cuando utilice la espátula para quitar desconchados de las paredes de yeso, debe pasar la hoja con suavidad, ya que de esta manera evitará hacer hoyos. En caso de que tenga que lijar algo antes de pintarlo, cúbrase la boca con un pañuelo humedecido y protéjase las manos con guantes de goma.
COLADOR DE PINTURA;
Un colador casero efectivo puede ser una media de naylon que ya no usa.