Según el diario, que esta semana publicó la exclusiva de la separación de la pareja, el acuerdo incluye el pago de al menos 20 millones de libras (unos 25,6 millones de euros) en metálico y la cesión de varias propiedades. Ritchie, que se encuentra rodando su última película, 'Sherlock Holmes', recibirá una mansión campestre en el condado de Wiltshire (suroeste de Inglaterra) y el pub que ambos poseen en el barrio londinense de Mayfair, 'The punch bowl'.
Según 'The Sun', el dinero en metálico cubre el valor de las propiedades de la pareja en Londres: una casa familiar de 7 millones de libras (unos 9 millones de euros) en el vecindario de Marylebone, la propiedad colindante, de diez habitaciones, y dos pequeñas casas en la misma zona que valen 2 millones cada una (unos 2,56 millones de euros).
El periódico estima el valor total del acuerdo en 60 millones de libras, que se suman a la fortuna que ya tiene el cineasta, cifrada en 25 millones (unos 32 millones de euros).
Madonna, por su parte, se quedará con las casas de Nueva York y Los Ángeles, en Estados Unidos, precisa el periódico, que apunta que la cantante no verá, con este acuerdo, demasiado mermada su fortuna, calculada en 300 millones de libras (unos 540 millones de euros).
Las negociaciones
Al parecer, los abogados de la pareja negociaron durante todo el viernes para llegar a un acuerdo lo más rápido y fácil posible.
"Las negociaciones fueron, relativamente, poco dolorosas. Guy sabía lo que quería y Madonna lo que quería conservar", dijo al rotativo una fuente cercana a la pareja.
Según el diario, se espera que Ritchie, de 40 años, y Madonna, de 50, lleguen a un acuerdo también sobre la custodia de los niños: Lourdes, de 12 años, que Madonna tuvo en una anterior relación; Rocco, de 8, el único hijo de la pareja, y David, de 3 años, al que adoptaron en Malawi.
Paralelamente, la prensa británica publica que el padre de Ritchie, John, calificó anoche de "desagradable" a la estrella del pop por los comentarios despectivos que ésta hizo sobre su todavía esposo durante un concierto.
En una actuación en Boston (EEUU) durante su gira Sticky and Sweet, Madonna dedicó la canción 'Miles away' a "los emocionalmente retrasados" y afirmó que ella conocía a uno, en clara alusión a su marido.
Además, la cantante inició su concierto con la canción 'I'm not sorry', horas después de haber anunciado su divorcio, y gritó al finalizar el tema: "Así es, no me arrepiento".