Esta certificación internacional reconoce aquellas playas que cumplen con estándares ambientales y de seguridad para los bañistas y sus instalaciones, como son calidad de agua, prestación de servicios generales y de ordenación de medio ambiente, educación e información ambiental, acceso y seguridad.
La certificación Bandera Azul es concedida a las playas en más de 30 países de Europa, Sudáfrica, Nueva Zelandia, Canadá, Brasil y el Caribe. El prestigioso premio es uno de cinco programas de educación del medio ambiente operado por la Non-Profit Organization, una fundación dedicada al cuidado del medio ambiente.
El programa de certificación Bandera Azul se originó en Francia en el 1997 para ayudar a mejorar la gestión de los residuos, así como la planificación y la protección costera. Todas las banderas azules son concedidas por una temporada a la vez y si no se cumplen los criterios durante la temporada o las condiciones de cambio, la bandera azul se retrae.