Por su parte, dijo Lantigua, la Dirección General de Museos tiene ya la evaluación de lo que debe hacerse para mejorar su colección museográfica y colocarla a tono con las exigencias actuales. El Ministro de Cultura señaló que con este trabajo, se mejorará gradualmente el Museo, a través de una "solución de mediano plazo", o sea de seis meses a un año. El presupuesto para esta parte está siendo elaborado actualmente.
Lantigua dijo estar de acuerdo con los reportes de prensa que denunciaron la situación de deterioro que se percibe en la edificación, situada en la Plaza de la Cultura Juan Pablo Duarte, al tiempo que agradeció el interés de la prensa por la misma.
"Existe, ciertamente, una situación de franco deterioro de la instalación física, que ha de cumplir cuarenta años en breve, y de abandono de su relevante museográfica". Añadió, sin embargo, que esta situación, no es propia de los últimos años. Informó que, "según empleados que están allí desde el proceso mismo de su construcción, el Museo comenzó a deteriorarse cuando aún no había llegado a su primer decenio de existencia".
"Empero, dijo Lantigua, no vamos a calificar gestiones ni a trasladar responsabilidades en esta situación. Resolver esta realidad compete ahora a nosotros y en esa labor estamos empleando desde hace varias semanas nuestras mejores energías".
Lantigua formuló sus declaraciones mientras realizaba una visita de inspección en el Museo del Hombre, acompañado de la Subsecretaria de Patrimonio Lourdes Camilo de Cuello; el Subsecretario Administrativo, Alexander Santana; la Directora de Recursos Humanos, Laura Haché; la Directora General de Museos, Ana María Conde, y el Director de Infraestructura Cultural, ingeniero Juan Fernández. También acompañaron al Secretario de Cultura en su recorrido, el director del Museo, Juan Rodríguez, y el subdirector Harold Olsen Bogaert.
"En verdad, hemos podido constatar que muchas de las soluciones que ahora estamos dando a la presente situación pudieron resolverse hace rato, si se hubiesen aplicado mecanismos gerenciales creativos, pues en verdad nada justifica las tantas faltas ortográficas, la carencia de letras en las leyendas, la ausencia de cédulas explicativas en los paneles expuestos, la falta de pintura y limpieza en los salones, entre otros aspectos que pudieron haberse atendido con mayor presteza y disposición", dijo Lantigua.