Según explica un artículo divulgado en The New England Journal of Medicine, las personas afectadas por esa dolencia y tengan una mutación en el receptor del factor del crecimiento epidermoide (EGFR), son sensibles a la acción de inhibidores de la tirosinquinasa, como es el Erlotinib, disponible en muchos hospitales.
Estos casos responden mejor a la terapia. En el grupo de ensayo se observó que los pacientes sólo experimentaban una recaída a los 14 meses, algo que normalmente sucede antes de los cincos meses después de recibir un tratamiento estándar.
La supervivencia media global rondó los 27 meses, es decir, casi tres veces más que los 10 u 11 meses de media que podemos esperar en esta enfermedad, manifestaron los autores del trabajo.
Con esta investigación se define a un subgrupo diferente de cáncer de pulmón, una enfermedad específica, con un mecanismo de acción distinto y una alternativa de tratamiento que ofrece respuestas inhabituales para este tumor, agregaron.
Aunque la alteración es más frecuente en mujeres, no fumadores y en quienes padecen un adenocarcinoma (un subtipo) o la población asiática, los especialistas recomiendan realizar el examen genético a todos.
Quienes no tengan la mutación EGFR no responderán al medicamento, subrayaron los científicos.