. Seguramente usted no es la excepción a la regla y alguna vez habrá quemado alguna prenda, para eliminar esa aureola amarilla deberá frotar la zona quemada con agua oxigenada rebajada al 50%, a la cual se le habrá añadido un chorro de limón, luego se podrá lavar normalmente, eso sí evite secarla al sol.
. Prepare el siguiente limpiador de joyas, el cual le resultará muy efectivo: mezcle amoníaco con agua y remoje su prenda durante unos minutos. Luego frótela con un paño suave.
. Para sazonar una carne cocina a la barbacoa, pásele, con una rama de romero, un poco de aceite o marinada; poco antes de que la carne esté lista, coloque la rama en el carbón que arde, de forma que este olor aromático se impregne en lo que se cocina.
. Si un corcho no quiere salir, pruebe dilatar el cristal con agua tibia y así se lo podrá extraer con mayor facilidad.
. No bote las bolsas usadas de la aspiradora, pueden servir varias veces si usted les vacía el polvo.
. Para abrir una lata de espárragos en conserva, hágalo por el fondo. De este modo podrá extraer los tallos sin echar a perder las delicadas puntas del vegetal.
. No gaste mucho dinero comprando limpiadores de metales de cromo. Una mezcla de amoníaco y agua hará un trabajo tan bueno como el mejor limpiador comercial.
. Siempre compre las sopas condensadas y no aquellas que vienen con agua añadida. Teniendo en cuenta el hecho de que el contenido de las sopas es, sobre todo, de agua, usted estará pagando dos o tres veces más por la versión condensada.
. No bote el jugo que viene con los pepinillos encurtidos cuando éstos se le acaben. En lugar de eso, mézclelo con aceite de oliva y tendrá como resultado un sabroso aliño.
. Para evitar que el abrelatas se oxide es conveniente de vez en cuando limpiarlo con gasolina y aplicar luego un poco de aceite de oliva. Si en cambio, ya está oxidado primero deberá frotarlo con medio limón empapado en sal gruesa y luego si proceda.
. Para mantener las alfombras siempre limpias y brillantes se deberá colocar en un balde agua tibia, un chorrito de amoníaco y el zumo de un pepino, luego pasarle un trapo a la alfombra embebido en esta preparación.