Seguro que estás pensando que tú no has podido atraer los problemas que tienes en la actualidad, que es el destino y esgrimas mil argumento para justificar tus desventuras; por ejemplo, ese préstamo que no puedes o te cuesta pagar, a ese cliente que no te paga o que te complica la existencia, el mal ambiente de trabajo, o simplemente que te encuentras sin trabajo; que todo lo que inicias no termina bien… en fin, achacas a tu mala suerte cualquier inconveniente que estés viviendo.
Posiblemente creerás que piensas correctamente y que todos tus deseos y tus pensamientos están volcados en construir una vida mejor y más fácil para ti y los tuyos.
Pues déjame que te diga que esa manera de pensar es errónea, que aunque no seas muy consciente de cómo llegan los problemas a ti y pienses que no tienes ningún control sobre eso, te aseguro que ATRAES LO QUE PIENSAS => LO BUENO Y LO MALO.
La manera en que tù hablas, tus pensamientos, tus emociones y tus sentimientos te predisponen a lo que va a suceder; haces una predicción del futuro que tratas de cumplirla por todos los medios. Tu mente funciona en piloto automático y según tú piensas, así responderá ante determinadas situaciones.
Recuerda esa mañana que te levantas de mal genio y con cara de poco de amigos. Estoy seguro que todo el día tenderá a ser igual, negro, conflictivo, nefasto y con seguridad encontraras personas con ese mismo talante, a no ser que cambies de la manera de pensar y de sentir.
Por el contrario, si te despiertas con la mejor buena onda, radiante, alegre y lleno de energía, con esa actitud durante todo ese día atraerás situaciones, circunstancias y personas que te mantengan así, feliz y en armonía con este estado.
Puedes sentirte mal o bien, lo que hará que tengas pensamientos negativos o positivos.
Cuando quieras saber qué estás atrayendo, hazte esta pregunta:
¿Cómo me siento? y estarás respondiendo a: ¿Qué estoy atrayendo en este momento?
Lo que estás sintiendo y pensado, es el fiel reflejo de aquello que está en proceso de convertirse en realidad.
Vivimos una época critica donde las malas noticias inundan nuestra vida, sean los diarios, la televisión, las revistas, la radio, todo (o casi todo) es negativo nos induce desánimo, pesimismo, frena nuestra ilusión y empuje, y lo más importante, esa mala energía nos baja la estima de si mismo, minimiza nuestros deseos por conseguir otra vida para nosotros y termina destruyendo nuestros sueños.
Pues es el momento de que digas: ¡BASTA YA!… No más…
¡SÍ! repite conmigo:
BASTA YA de quejarme por la mala suerte que tengo y no ser feliz.
BASTA YA de destruir mis sueños por falta de buenos pensamientos.
BASTA YA de sentirme sin deseos de cambiar y crecer.
BASTA YA de pensar que no puedo concretar mis sueños.
BASTA YA de esperar un golpe de suerte que me saque de este estado.
BASTA YA de pensar que "otros" solucionaran mis problemas.
BASTA YA de no cuidar mi mente ni mi cuerpo.
BASTA YA de perder el tiempo dejando para mañana lo de hoy.