El actor, que veraneó durante años en Marbella, y su mujer figuran entre los siete nuevos imputados por el Juzgado de Instrucción número 1 marbellí en una causa que ha entrado en una nueva fase tras la inicial que ya sumaba 21 imputados.
Las imputaciones de Connery, su esposa y los abogados, se suman a la de una veintena de personas que ya han declarado por otras operaciones urbanísticas.
El juzgado investiga la venta de la finca Casa Malibú, que había sido propiedad del actor escocés Sean Connery, de 79 años, y donde se levantó un complejo de apartamentos de lujo en primera línea de playa.
El actor que encarnó al famoso agente 007 compró la mencionada finca en los años setenta y los puso en venta en por nueve millones de dólares 28 años después a través de la inmobiliaria británica Knight Frank.
La casa tenía una residencia principal, tres estancias para invitados, piscina y jardines.
La parcela donde Connery residió al menos dos décadas con su esposa Micheline está ocupada hoy por una urbanización de lujo habitada, pero ilegal porque se ha construido más de lo permitido.