El huevo se forma gracias a una proteína que es clave para su generación y esa sustancia es generada por la gallina, por lo que esta debió existir primero para producir el primer huevo.
Dicha proteína había sido descubierta con anterioridad en los ovarios del ave, pero no fue hasta ahora que los ingleses comprendieron su real trascendencia.
La conclusión echa por tierra una teoría previa que concluyó lo contrario. En esa oportunidad, en el 2006, un filósofo, un avicultor y un científico explicaron que el material genético no se transforma durante la vida animal, por lo que el ave habría existido primero como embrión.