Por lo regular el cóctel que lleva jugo de fruta se bate o sea que se agita suavemente en la coctelera y el que contiene licores se mueve suavemente en circulo (o sea que se menea) en el vaso o con una cucharita. Los cócteles siempre deben servirse fríos. Los cócteles pueden clasificarse según varios criterios.
Veremos como se categorizan según la función que cumplen:
– Para los aperitivos se emplean principalmente bebidas que estimulan el apetito, como el vermut o el bitter.
– En el caso de los que son nutritivos, se encuentran aquellos que incluyen huevos, crema de leche, frutas, u otras sustancias alimenticias en sus ingredientes.
– También hay cócteles digestivos, los cuales son ideales para la sobre mesa, en general contienen brandy, coñac, aguardientes o licores, en especial de menta.
– Los refrescantes son los que calman la sed, estos combinan alcohol con los jugos de frutas, agua tónica u otras bebidas gaseosas.
También los podemos clasificar según su estructura o fórmula básica, aquí encontramos:
– Cup: A base de vino, se acompaña con una pequeña proporción de una bebida más fuerte o licor. Suele ser un cóctel liviano.
– Fizz: Por lo general se prepara en una jarra, donde se incorpora un destilado o licor, limón, azúcar, agua o una bebida gaseosa, también puede llevar frutas. Es un trago largo.
– Egg-nog: Éste es una combinación de yemas, azúcar y un destilado, se completa con crema y puede beberse frío o caliente.
Y para finalizar les dejamos con la receta de una bebida fuera de serie: Bloody Mary.
Ingredientes:
1½ onza de vodka
3 onzas de jugo de tomate
3 gotas de salsa de Tabasco
1 limón, el jugo
½ cucharada de salsa inglesa o Worcestershire Sal y pimienta molida al gusto
Hielo al gusto
Preparación:
Lleve todos los ingredientes a un vaso mezclador y agite con una cucharilla larga hasta que quede todo bien integrado. Sirva en un vaso largo con hielo y decore con un tallo de apio.