Las pequeñas protagonizan un reportaje fotográfico publicado en Vogue Paris Cadeux (especial regalos), en el que aparecen vestidas con modelitos de Yves Saint Laurent, Lanvin o Versace, subidas en tacones de vértigo de Balmain y Louboutin y luciendo brillantes y carísimos collares de Bulgari, Boucheron y Van Cleef & Arpels.
Las imágenes fueron realizadas por el famoso fotógrafo Sharif Hamza y muestran a las menores en actitud demasiado sensual, excesivamente maquilladas y luciendo vestidos de alta costura. Todo esto muy poco apropiado para niñas de su edad.
A raíz de su publicación, multitud de voces se han alzado alrededor del mundo en contra de mostrar a las menores intentando convertirse en supermodelos adultas y en actitud sensual y provocativa.