Trípoli, 31 oct (PL) El Consejo Nacional de Transición confirmó hoy el descubrimiento de armas químicas y nucleares, coincidiendo con el fin de la agresión de la OTAN a Libia y especulaciones sobre la suerte de Saif Al-Islam El Gadafi.
Un dirigente de la insurgencia informó al canal satelital Al-Arabiya que próximamente se revelarán pormenores del hallazgo de armas prohibidas en esta nación norafricana, y que el autoproclamado primer ministro interino, Mahmoud Jibril, dará curso legal al asunto.
Mohammed Al-Saeh, funcionario del Consejo Nacional (CNT), comentó al referido canal televisivo que Jibril prevé remitir el caso de las armas químicas a la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA), luego que en la rueda de prensa de hoy se divulguen detalles oficiales.
La fuente precisó a Al-Arabiya que el arsenal encontrado en un sitio no especificado de Libia es nuclear y el CNT ya contactó con el OIEA para que sus expertos examinen y confirmen la naturaleza del material antes de concluir esta semana.
En declaraciones ofrecidas el domingo, Jibril aseguró que no les interesa mantener ese tipo de armamento, de ahí la solicitud para que sea controlado y destruido por la entidad internacional.
Para algunos analistas, la prominencia dada al tema de las armas sirve de cobertura al CNT para relegar a un segundo plano el cese oficial de la misión de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en este país, tras más de siete meses de bombardeos.
Con una cifra elevada de víctimas humanas (civiles y militares), aunque será difícil conocerla con exactitud, la OTAN lanzó desde el 19 de marzo bombardeos casi diarios sobre Libia que totalizaron unas 10 mil acciones ofensivas en 26 mil vuelos.
El bloque atlántico dará por finalizada la próxima medianoche su labor en Libia amparada por la ONU, pese al suplicante reclamo hecho la semana pasada en Catar por el líder del CNT, Mustafa Abdul Jalil, para que permaneciera aquí hasta finales de 2011.
Según Jalil, el pedido pretendía que la OTAN ayudara a la insurgencia libia a perseguir, capturar y evitar la fuga de miembros del gobierno de Muamar El Gadafi, para juzgarlos en el país.
Precisamente, un portavoz del CNT señaló el interés de que Saif Al-Islam El Gadafi sea procesado en Libia por un tribunal nacional, pese a que existe contra él una orden de captura de la Corte Penal Internacional (CPI) por supuestos crímenes contra la humanidad.
El hijo menor del exlíder libio sigue en paradero desconocido, pero negocia su entrega a la CPI para que se le juzgue en La Haya, en lugar de Trípoli, donde descarta recibir un trato justo tras constatar el asesinato de su padre y su hermano Muatassim, el pasado 20 de octubre.
Las muestras de odio e intolerancia del CNT hacia todo símbolo del gobierno de El Gadafi hicieron ordenar la demolición del complejo Bab Al-Aziziyah, que servía de residencia al exmandatario en esta capital, destrucción que de dio por concluida este domingo.mem/ucl