El médico personal del Rey del Pop Michael Jackson habría cometido
errores graves al aplicar propofol al cantante fuera de un centro hospitalario,
dijo en el juicio que se le sigue a Conmrad Murray un testigo clave.
El médico Paul White al exponer ante el tribunal como
testigo del acusado dijo que Murray debió llamar a la emergencia hospitalaria y
que el jamás había considerado aplicar el medicamento fuera de un recinto hospitalario.
Señaló que el anestésico propofol -la droga que causó la
muerte del artista el 25 de julio de 2009, según la autopsia- no debe ser
administrado en el cuarto de una casa particular, tal como ocurrió en el caso
del rey del pop, refiere la BBC en una reseña del juicio.
De todo modo, aclaro, que no esta prohibido por ley aplicar
el anestésico fue del hospital, aunque insistió en que el día en que falleció
el artista Murray se apartó de los estándares médicos.
En un agresivo interrogatorio ante el fiscal David Walgren,
el especialista señaló que nunca antes había escuchado que se prescribiera el
uso del poderoso sedativo fuera del ámbito hospitalario.
En el comienzo de su testimonio, el viernes pasado, White
había dicho que el cantante, de 50 años, probablemente se había inyectado una
dosis letal del sedativo sin el consentimiento de Murray, causando su propia
muerte.
White es el último testigo de la defensa en el juicio, sobre
cuyas conclusiones los abogados de Murray habían basado gran parte de su
estrategia para probar la inocencia. La fiscalía, sin embargo, intentó retratar
a White, un experto en la investigación del propofol, como un mercenario que
recibió al menos US$11.000 por trabajar en el caso y testificar ante el jurado
de Los Ángeles.