Washington, 1 nov (PL) Un equipo de investigadores estadounidenses
desestimó la hipótesis de que mujeres con antecedentes familiares de
tumores mamarios pudieran contraer la enfermedad, destaca un reciente
estudio.
Hasta ahora los estudios sugerían que un pariente con mutaciones en los
genes BRCA1 o BRCA2 eleva el riesgo de una persona de desarrollar cáncer
mamario, aún cuando sus propios resultados fueran negativos.
Sin embargo, el estudio publicado en la Journal of Clinical Oncology,
comprueba que sólo de un cinco a un 10 por ciento de los tumores
mamarios son genéticos y la mayoría de esos casos son provocados por
anormalidades en esas secuencias.
Para llegar a estas conclusiones, el equipo investigativo liderado por
Allison Kurian, de la Escuela de Medicina de la Stanford University,
analizó datos de más de tres mil familias con mutaciones en esos genes
en pacientes de Estados Unidos, Canadá y Australia.
También compararon las tasas de cáncer entre las portadoras y las no
portadoras de las variaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 con
antecedentes familiares.
Los resultados son alentadores, pues no observamos ninguna señal de riesgo de cáncer elevado en esas mujeres, destacó Kurgan.
lac/alb