Intentan crear gobierno libio, pese a disputas entre insurgentesTrípoli, 1 nov (PL) El empresario Abdul Rahim El-Keeb, recién electo primer ministro por el autonombrado Consejo Nacional de Transición (CNT), afirmó hoy que su prioridad es formar un nuevo Gobierno libio, aunque reconoció hondas divergencias dentro del liderazgo insurgente.
"Nos esperan muchos retos, como los heridos o el tema de los prisioneros de guerra, pero la prioridad ahora es ponernos de acuerdo en el CNT sobre la creación de un Gobierno y la lista de ministros", afirmó el también ingeniero y académico.
Ganador frente a otros tres candidatos sometidos anoche al voto de 51 integrantes del CNT, El-Keeb logró una apretada mayoría de 26 y debe sustituir a Mahmoud Jibril, autoproclamado jefe de Gabinete poco después de iniciar la insurrección que derrocó a Muamar El Gadafi.
El flamante primer ministro de facto aseguró el lunes que podría nombrar un Ejecutivo en los próximos días para conducir los destinos de Libia durante el período de transición de entre ocho y 10 meses que deberá anteceder a la elección de una Asamblea Constituyente.
Tras declarar el fin de ocho meses de guerra y siete meses de bombardeos aéreos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el pretendido gobierno libio se fijó un cronograma de 20 meses hasta celebrar elecciones presidenciales y legislativas.
La hoja de ruta de la llamada transición libia prevé que el CNT, un ente alentado y protegido por la OTAN, ceda el mando en los próximos ocho a 10 meses a la Asamblea Constituyente que, a su vez, debe redactar la Constitución y preparar los comicios generales.
Durante una rueda de prensa ofrecida anoche en Trípoli, el profesor universitario que vivió 30 años en Estados Unidos prometió "construir una nación que respete los derechos humanos y no acepte el abuso de esos derechos, pero necesitamos tiempo".
Sin embargo, respondió vagamente y con evasivas a preguntas de periodistas sobre la captura y asesinato de El Gadafi, su hijo Muatassim y su exministro de Defensa Abubakr Yunnis, el 20 de octubre.
"Somos muy concientes de que nuestros hermanos, los revolucionarios, los combatientes, comparten la misma opinión que nosotros. Ellos también creen que la estabilidad del país es sumamente importante", señaló El-Keeb el mismo día que finalizó la misión agresiva de la OTAN.