La Fundación para la Defensa de los Derechos
del Consumidor, Fundecom, celebra en este mes de noviembre, sus doce años de
Fundada. Es decir existe desde noviembre de 1999.
Pocas veces en la historia
nacional una entidad de la sociedad civil ha rendido tantos frutos a la sociedad en tan poco
tiempo. Resulta que para la fecha de la fundación de Fundecom, los derechos del consumidor
estaban ausentes del debate nacional, ni siquiera existía una ley sobre los
derechos del consumidor o usuario.
Es con la llegada de Fundecom a la vida
pública nacional que se inicia la época de la lucha por establecer los derechos
de quienes se sostiene en la actualidad, son los que ostentan la categoría más
actualizada sobre derechos los humanos del
hombre y del ciudadano, en razón de que la Revolución Francesa de 1789,
inauguró derechos civiles y políticos conocidos enteoría de los derechos, como derechosde primera generación, los cuales han
conseguido establecerse y forman hoy en día parte de la cultura de las naciones
civilizadas.
A esos derechos de primera generación les han
sucedido otras generaciones de derechos considerados de Segunda Generación,
como es el caso de los derechos económicos y sociales y, luego se ha llegado a
los derechos de Tercera Generación en donde los derechos del consumidor ocupan
un lugar destacado dentro del racimo de derecho arrancados por los pueblos a sus
gobernantes.
En pocas palabras, al hablar de derecho se dice que el slogan de la
Revolución Francesa de libertad, igual y fraternidad, representa una generación de
derechos, así, los de Primera Generación, son derechos ligados a la libertad
humana, es el denominado liberalismo político; luego viene la segunda
generación capitaneada por la igualdad y que muchos dicen que se oficializó con
la Declaración sobre Derechos humanos hecha por Naciones Unidas en 1948; pero
que corresponde más bien al Estado Social iniciado por
Bismarck en Alemania hacia 1881. Pues el Estado Social nació de las insuficiencias del Estado
liberal que se quedaba en ofrecer solo derechos civiles y políticos y derechos
económicos a una única clase social, lo cual generaba múltiples conflictos dada
la latente desigualdad imperante sobre el resto los integrantes de la sociedad.
Los derechos de tercera generación entran por
la puerta grande al ruedo público internacional con el discurso de JF Kennedy
en 1962, bajo el lema de que “todos somos consumidores”, indicando con ello que
todos podíamos ser afectados por los excesos y malas prácticas de oferentes de bienes
de consumo y de servicios, por tanto, se debían dictar leyes de defensa al
consumidor o usuario, las palabras de Kennedy estaban focalizadas en la
industria farmacéutica y la industrias de alimentos, pues muchos medicamentos
estaban ocasionando daños al ser humano, por ejemplo, la talidomida era un
medicamento muy popular que estaba ocasionando malformaciones en los fetos de
las embarazadas, y los enlatados y sus preservativos
habían hecho su impronta en el mercado de Estados Unidos y en el mercado
internacional y ya estaban dejando secuelas muy lamentables en los
consumidores globales, por lo que requerían de regulación legal, sobre todo los químicos para la
agropecuaria, etc.
Lo interesante es que la Fundecom, con pleno
conocimiento de causa, se propuso hacer que la República Dominicana
entrara por la puerta grande de los derechos de Tercera Generación y ha tenido
éxito en su empresa. Así lo demuestra, por ejemplo, las declaraciones de esta
semana (jueves 24-11-2011, página 19 del Diario El Caribe, de una alta
ejecutiva empresarial de la Asociación de Industrias de la Región Norte, AIREN,
que opera en la ciudad de Santiago, Señora Lina García de Blasco, Presidenta de
AIREN, quien más o menos refería que: ”El derecho cada vez más exigente de los
consumidores dominicanos es
uno de los nuevos parámetros que debe tomar en cuenta la producción industrial
dominicana.”, para agregar: “los
consumidores esperan calidad en los productos y tambiénun conjunto de atributos en el servicio que se
les ofrece”.
Qué
decir de la lucha de Fundecom contra el empleo del bromato de potasio en la
elaboración del pan, lucha por la regulación del sistema de pesos y medidas,
contra el uso de preservativos en las gaseosas y las golosinas en general;
contra el robo en el gas propano, contra la venta de aguas contaminadas como agua
potable, etc. La oficialización de estos derechos de Tercera Generación,
ocurren a lo largo y ancho de la década de los años sesenta del siglo XX y
culminan en 1984 cuando Naciones Unidas decide aprobar la Carta del Consumidor.
Fundecom libra una tenaz
lucha por conseguir una ley para el Consumidor dominicano, la cual culmina en la aprobación de la ley
358-05, para luego tratar de que el Derecho del Consumidor tuviese rango
constitucional, éxito que exhibe la Constitución de 2010, en su artículo 53,
entre otros. Posee una revista “Reporte del Consumidor”, un programa de radio y
ya es una organización que opera a nivel nacional con más de 20 filiares, es
miembro de Consumers International. Es decir, existen razones para
felicitar a Fundecom no por su aniversario, sino por la labor social
desempeñada a favor y provecho del Pueblo Dominicano.
Claro, Fundecom está consciente de que ahora
deberá librar una tercera batalla consistente en concienciar a los funcionarios públicos,
sobre todo a aquellos que tienen bajo su
responsabilidad órganos sectoriales, que vivimos bajos los dictados
constitucionales de
un Estado Social y Democrático de Derecho, lo que mutatis mutandi significa que los
razonamientos decimonónicos del Estado liberal han quedado atrás, han sido
sustituidos por la noción más democrática y realista de Estado Social, noción
incluyente que les
obliga a inclinar sus decisiones por el equilibro social y la preferencia por los
ciudadanos más vulnerables en toda relación contractual de mercado o de
servicios sean estos públicos o estatales.
Ahora que Estados Unidos ha decidido crear
desde el 21 de julio de 2011, una poderosa oficina para la defensa del usuario
de servicios bancarios, amparada en la Ley pública No. Pub. L.
111-203, conocida como ley Dodd-Frank Wall Street
Reforma y Protección al Consumidorque es una extensa ley de defensa al
consumidor de servicios financieros,se busca que el tarjetahabiente no sea objeto
de daños ocasionados por la voracidad de capitalismo
especulativo o capitalismo de casino como le ha llamado Leonel Fernández.DLH-27-11-2011