El mes de diciembre es considerado tal vez el más trágico del año por la
cantidad de personas que fallecen en accidentes de tránsito. En principio, se
estima que la causa principal de esos fallecimientos son las intoxicaciones
alcohólicas y el manejo imprudente de los conductores de ambos sexos.
Las carreteras y autopistas se llenan de vehículos con ciudadanos que
entran y salen de las ciudades en busca de un espacio distinto al que ya están
acostumbrados a vivir, tratando de escapar de la rutina diaria y esclavista
El éxodo de personas es enorme. La mayor parte de los viajeros va
acompañado de familiares, pero también de botellas de whisky, cervezas y otras
cositas que los elevan a las nubes.
Mujeres, niños, adolescentes y adultos han partido violentamente hacia
los brazos del Divino Creador por vía de los accidentes. Al parecer, la Navidad
tiene energía especial para la gente que no repara en que esos son días para
quedarse en la casa descansando o disfrutando con la familia. ¿Cuál es la razón
de abandonar su hogar para visitar a parientes y relacionados, si esas cosas se
pueden hacer en cualquier mes del año? ¿Por qué tiene que ser en Diciembre?
¿Qué hay de especial en eso?
Otra causa de las muertes por accidente es el afán de los choferes del
transporte público en rendir el peso echando dos o tres viajes en un día desde
el interior a la capital y viceversa. Lo más natural es que el cansancio se
apodere de los conductores en esas locas travesías. Miles de colisiones y
vuelcos de vehículos se han producido en esas circunstancias con balances
trágicos.
Observen el siguiente dat El 70% de las personas accidentadas en el
país en las carreteras, calles y avenidas son jóvenes de entre 15-49 años,
según un estudio titulado “Traumatismos y
lesiones por accidentes de Tránsito en República Dominicana 2010”, realizado
por el doctor Adrian Puello, que también registra que la mayor frecuencia de
los accidentes corresponden a motoristas. La investigación trata de una tesis
para la maestría que realiza este profesional en Salud Pública y Epidemiología
y se produjo por los acuerdos de cooperación entre la universidades Autónoma de
Santo Domingo y la Bordeaux Segalen de Burdeos, en Francia junto al Consejo
Nacional de Seguridad Social (CNSS).
Las vías públicas están repletas de locos detrás del volante. Son
asesinos en potencia que en cualquier momento se llevan de cuajo a un ciudadano
y escapan velozmente del escenario para desaparecer sin dejar rastro. Y todo
sigue igual.
He perdido a muchos amigos y relacionados en accidentes de tránsito. No
valieron mis consejos para que disfrutaran la Navidad en el hogar. He llegado a
la conclusión de que esa es una decisión torpe, estúpida y sin sentido, propia
de la ignorancia.
Por otro lado, hay quienes aprovechan ese momento de regocijo familiar para
hacer “bultos”, exhibiendo ropa nueva para lo cual gastan dinero innecesario
que luego les hará falta en el mes de Enero. Otros sacan muebles y electrodomésticos
utilizando las tarjetas de crédito, documentos que constituyen una estafa y una
usurería legalizada, y se endeudan cogiendo prestado. El resultado, como es de
suponerse, es una resaca económica de alta dimensión y un endeudamiento
descomunal. Lamentablemente, estamos contemplando a una sociedad que alberga a
muchos ciudadanos con cerebros desnutridos, si esperanza de regenerarse.
