Diciembre
14, 2011. Varias instituciones que lucha por el medio
ambiente en Republica Dominicana deploraron este miércoles los resultados de la
cumbre sobre el Cambio Climático celebrada en Sudáfrica.
En declaraciones
emitidas por las instituciones que conforman en el país el consorcio CLIMACCION
se afirma que el mismo se convirtió una vez más en una quimera, plagada de
trámites burocráticos que impidió
establecer responsabilidad y proveer
expectativas reales de avance en los compromisos de los países y en las negociaciones
justas y equitativas para contribuir a combatir el cambio climático. Explicaron
que una vez más el intento no cumplió las expectativas.
Destacan que entre
los hitos más relevantes del conclave se encuentra la evidencia de que algunos de los países contaminantes
obstaculizan la lucha contra el cambio climático, tales como China y Estados
Unidos.
En ese sentido
señalan que ambos países están tratando
de renegociar la postergación de la finalización del Protocolo de Kioto, único tratado legalmente vinculante que fija
obligaciones a los países desarrollados para la reducción de emisiones de gases
de efecto invernadero.
Señalan dentro de
los hallazgos más trascendentes, la urgencia de encontrar soluciones a las
emisiones mundiales de dióxido de carbono, procedentes principalmente de la
quema de combustibles fósiles para la energía, la industria y el transporte.
Otro aspecto que
resalta CLIMACCION, organización compuesta por varias entidades que promueven
la protección del medio ambiente y llevan a cabo en el país planes para
edificar y contrarrestar el cambio climático, es la posición encarnizada por
países como Japón y Canadá, los mismos con índices considerables de reducción
de emisiones, quienes dejaron claro en el encuentro mundial que Kioto es
insuficiente si no obliga también a reducir emisiones a los principales países
contaminantes que no están incluidos en el tratado, como EEUU, India y China.
Dentro de las
conclusiones citan, la ampliación de la vigencia del Protocolo de Kioto al
2020, el cual finalizaba en el 2012, y la inclusión de los países menos
desarrollados (PMD) en los compromisos de reducción de emisiones de dióxido de
carbono.
Sin embargo
entienden que son muchos los desafíos al señalar que los países se enfrentan a situaciones que
dificultan enormemente los procesos de negociación de acuerdos globales justos
y equitativos y no permiten avanzar en la búsqueda de alternativas hacia la
conservación de la vida sobre el planeta.
Las instituciones precisan
que mientras el tiempo pasa los daños y
efectos continúan, el planeta se deteriora, y se hace impostergable que se
encuentren vías para un compromiso global real para la reducción de emisiones y
el apoyo para la adaptación de los países menos desarrollados a los efectos
meteorológicos extremos.
A propósito de la
Decimoséptima conferencia de las Nacionales Unidas sobre el cambio climático, Climacción entiende que el financiamiento,
en países como la República Dominica, es un punto fundamental para que estas
naciones puedan avanzar en la construcción de capacidades para la adaptación al
cambio climático. Sostienen que la comunidad internacional no puede, bajo
ninguna circunstancia, considerar los recursos de la cooperación para el
desarrollo y la pobreza como fuente para este financiamiento.
¨Este
financiamiento, el Fondo Verde, como se le ha llamado desde el año pasado en la
COP-16, celebrada en Cancún, México, debe ser independiente al de cualquier
otro relacionado al desarrollo y la pobreza¨, indicaron.
De lo contrario
señalan que se estaría limitando el
desarrollo de dichos países, y al mismo tiempo incrementando los niveles de
pobreza, y daños ambientales que repercutirán a nivel global haciendo cada vez
más insostenible la vida en el planeta.
En ese sentido,
Climacción precisa que la obtención de nuevas fuentes de financiamiento se ve
obstaculizada en la actualidad por la crisis económica que afecta a la mayoría
de los países desarrollados.
A nivel nacional y
a raíz del cónclave internacional, CLIMACCION hace una serie de recomendaciones
y exhortaciones a políticos y al
empresariado dominicano para que crean en la economía verde,
eficientizando procesos productivos y
potencializando el desarrollo sostenible.
En ese sentido
solicitan la creación de marco normativo
e institucional solido que gestione el financiamiento para la adaptación, la
transferencia tecnológica y el fomento de la educación, formal e informal. Por
igual demandan de la preparación de una Estrategia Nacional para Adaptación al Cambio
Climático. Este plan debe contemplarse como uno de los pilares la construcción
de capacidades y la transferencia de conocimientos.
Otro aspecto que
recomiendan es que dentro de la Estrategia Nacional de Desarrollo, se
privilegie las acciones encaminadas a hacer más eficientes los procesos
productivos y a lograr la sostenibilidad de los principales sectores de la
economía dominicana, tales como Energía, Residuos Sólidos, Turismo,
Construcción, Transporte, Combustibles, Educación, Agricultura, y
Reforestación. De igual manera, se privilegien las acciones de prevención y
reducción de vulnerabilidad de las zonas más pobres de país.
Piden que se garantice
la protección y conservación de las áreas protegidas para la conservación de
los activos ambientales nacionales y reducción de emisiones por deforestación, a través de políticas de conservación
específicas y el financiamiento nacional e internacional. Así mismo solicitan trabajar
en la reducción y control de incendios forestales, promoviendo la participación
comunitaria como formar de que se maximicen los recursos disponibles y se promueva
la unión de esfuerzos de diferentes sectores con estos fines.
Otra exhortación de
Climacción para los políticos y empresarios, consiste en que se fomenten
mecanismos para el monitoreo y control de la ejecución de proyectos, que vele
siempre por la sostenibilidad de los mismos. Asimismo, se creen los mecanismos que
garanticen el cumplimiento de los acuerdos y convenios internacionales de los
cuales el país sea signatario.
Como una última
recomendación proponen que se trabajen, conjuntamente con los Ministerios de Educación
y Medio Ambiente y Recursos Naturales, programas para el desarrollo, educación
y fortalecimiento de las capacidades de adaptación de las zonas vulnerables del
país, involucrando a las escuelas y jóvenes de distintos niveles sociales.