Teherán, 19 dic (PL) Autoridades militares de Irán advirtieron hoy que
Estados Unidos se prepara para prolongar su presencia en Medio Oriente,
pese a la retirada de Irak, mientras los servicios de inteligencia
revelaron nuevas acciones de espionaje norteamericano.
El comandante de las fuerzas terrestres del Ejército iraní, brigadier
general Ahmadreza Pourdastan, señaló que el repliegue estadounidense del
vecino Irak es resultado de cambios en los planes estratégicos de
Washington para la región, donde pretende quedarse.
"Todo indica que los estadounidenses se están preparando para una
presencia a largo plazo en Medio Oriente, apuntó Pourdastan, al
mencionar el mantenimiento de bases militares en Bahrein, los Emiratos
Árabes Unidos y Catar, y el gran número de efectivos en Afganistán.
El jefe castrense se refirió también a la reubicación en bases de Kuwait
de buena parte de los uniformados extranjeros que salieron ayer de
Irak, como otra señal de que al Pentágono sigue interesado en tener
fuerzas en la zona para controlar la mayor ruta de tránsito de crudo.
Las declaraciones de Pourdastan estuvieron antecedidas por la difusión
en la televisión estatal de la República Islámica de confesiones de un
iraní apresado por sus labores de espionaje para la Agencia Central de
Inteligencia (CIA) norteamericana.
El reportaje transmitió el domingo una entrevista grabada en la que se
mostraron fotos y documentación de Amir Mirza Hekmati, quien aseguró
haber recibido entrenamiento por los servicios de espionaje de Estados
Unidos para viajar a Irán y desinformar a la inteligencia persa.
Hekmati estuvo alistado en bases estadounidenses de Irak y Afganistán, y
declaró que agentes de Washington le dijeron que "si cumples esta
misión con éxito, podremos entrenarte mas, darte otras misiones … esta
requiere que viajes a Irán".
Agregó que se le orientó convertirse en fuente de información militar y
de inteligencia para los iraníes durante tres semanas, y recibiría
dinero por ello.
La justicia de Irán acusó el martes pasado a 15 personas por espionaje
para Estados Unidos e Israel, luego que en mayo anunció el arresto de
una red de 30 agentes de la CIA involucrados en actos de sabotaje y
búsqueda de información secreta.