En este informe “Fitch Ratings” mantiene la perspectiva para el indicador de riesgo de emisión tanto en moneda extranjera como nacional en B y el techo país en B+. El informe resalta que la República Dominicana tiene moderados niveles de deuda y altos niveles de PIB per cápita al compararse con países de igual categoría B. <br>
El ministerio de Hacienda que dirige Daniel Toribio Marmolejos dio a conocer el informe en inglés y español.<br>
“Fitch Ratings” señala que continúa siendo importante preservar la estabilidad macroeconómica para afianzar la confianza de los inversionistas y reducir las vulnerabilidades externas.
<span style="font-weight: bold;">Informe en español</span><br>
Fitch Ratings-Nueva York- 4 de enero de 2012: Fitch Ratings confirma las calificaciones de la República Dominicana como sigue:
–Moneda Extranjera (Indicador Riesgo del Emisor): 'B';
–Moneda Local (Indicador Riesgo del Emisor): 'B';
–Techo-país 'B+';
–Moneda Extranjera de Corto Plazo (Indicador Riesgo del Emisor): 'B'.
La perspectiva para el indicador de riesgo del emisor, tanto en moneda local como en moneda extranjera, se mantiene en Positiva.
La perspectiva positiva refleja el buen desempeño macroeconómico de la República Dominicana, la mejora de las perspectivas de los ingresos por exportación dado el desarrollo del sector minero y el incremento en la disponibilidad de fuentes de financiamiento tanto externas como domésticas. De todos modos, Fitch entiende que la incertidumbre entorno al Acuerdo con el FMI y la cercanía de las próximas elecciones presidenciales, así como el riesgo asociado al desempeño de la economía global, limitan la posibilidad de mejorar el perfil de crédito.
La calificación de la República Dominicana la sostienen los moderados niveles de deuda, y altos niveles de PIB per cápita en comparación con sus pares de la categoría B, indicadores de desarrollo social relativamente fuertes y un ambiente de negocios competitivo que soporta los flujos de inversión extranjera directa.
A pesar de una reducción del crecimiento a un estimado de 4.4% en 2011, el promedio del crecimiento económico de los últimos 5 años se mantiene en línea con sus pares. La inflación promedio de alrededor de 8.5% en 2011, es menor que la media de los países categoría B. Las expectativas de moverse a un régimen formal de metas de inflación en 2012, podrían realzar la estabilidad macroeconómica en el mediano plazo.
“El incremento en las exportaciones mineras están fortalecimiento la capacidad de la economía de generar mayores y más resistentes ingresos corrientes externos, mitigando las vulnerabilidades de las cuentas externas”, dice César Arias, Director Asociado en el Grupo Fitch Ratings. Como resultado, Fitch espera que el déficit de cuenta corriente sea menor al de la media de los países “B” del 5% del PIB para el 2013.
“El país se ha beneficiado del apoyo financiero de los multilaterales, un acceso constante a los mercados de capitales internacionales y del rápido desarrollo del mercado local de títulos del gobierno’, añadió Arias. En adición, el Tesoro a pre-financiado en 2011 su programa de emisiones en el mercado internacional 2012, y ha asegurado US$1bn para el apoyo presupuestario y el financiamiento de proyectos de inversión para el 2012.
Impulsadas por los desembolsos de los multilaterales, las reservas internacionales se mantienen a niveles máximos históricos y por encima de las metas acordadas con el FMI, soportando así la sostenibilidad del tipo de cambio controlado. De todas maneras, el ratio de liquidez externa en un 97% in 2012, es significativamente más débil que el de sus pares, y las necesidades de financiamiento externo del país se encuentran entre las más altas de la categoría “B”.
Por esto, Fitch entiende que preservar la estabilidad macroeconómica y el soporte de parte de los multilaterales, continua siendo importante para afianzar la confianza de los inversionistas y reducir las vulnerabilidades externas.
Una estrecha base impositiva y altos subsidios al sector eléctrico han ralentizado la consolidación fiscal and han retrasado la completa implementación del Acuerdo Stand-by con el FMI, correspondientes desembolsos. A pesar de esto, Fitch estima que el déficit fiscal en 2011 fue moderado, debido a la contracción de los gastos y los ingresos adicionales resultantes de la reforma fiscal aprobada. En adición, la deuda del gobierno a un 29% del PIB, se mantiene más baja que los países pares, y los pagos de amortizaciones son manejables en comparación los que tienen países pares “B” y “BB”.
De cara al futuro, una mayor confianza en la habilidad del próximo gobierno de mantener la estabilidad macroeconómica y el amplio soporte de los multilaterales serán positivos para el crédito. Una reducción sostenida de las vulnerabilidades externas también generará presiones para el alza de la calificación. Por otro lado, una fuerte disminución en entradas de capitales (no relacionadas a deuda) o un choque en la confianza como resultado del proceso electoral, que provoquen presiones a la moneda, y una marcada erosión a las reservas internacionales, sería negativo para las calificaciones.