La Policía reportó la muerte de seis personas, tres de ellas por
suicidio, una por electrocución, una por intoxicación alcohólica y una por
ahogamiento, en hechos ocurridos en Santo Domingo Este, Neyba, Baní, Constanza
y San Juan de la Maguana.
Dijo
que las víctimas son Carlita Alexandra Castro Ramos, de 22 años; Rojo Ferreras,
de 62; Brigida María Reynoso, de 60; Félix de Jesús Disla, de 60; el niño Darwin
Mosquea Andujar, de 2, y el menor Daril Alexander Jiménez López, de 15.
Un
informe de la Policía
indica que la joven Castro Ramos se suicidó ahorcándose dentro de la habitación
en su residencia ubicada en la calle Quisqueya, número 6, del sector Almirante.
Según la versión de su madre, Carlita Ramos Vallejo, desde hace días la notaba
deprimida.
En
poder de los investigadores policiales hay una carta que supuestamente escribió
Castro Ramos explicando los motivos que la obligaron a tomar la decisión de
atentar contra su vida. Alega que se suicidaba para no tener que matar a un
hombre al que identificó como Juancito.
Mientras
que el agricultor Rojo Ferreras, de 62 años, fue encontrado muerto en un camino
vecinal del sector El Cerro, municipio Los Ríos, cerca de su residencia, y
según el diagnóstico del médico legista la defunción se debió a un infarto
agudo al miocardio producto de una intoxicación alcohólica.
Al
ser interrogada Eneudis Novas Ferreras, hermana del occiso, dijo que Rojo Ferreras
salió a tempranas horas de ayer a ingerir bebidas alcohólicas y que éste se
había intoxicado en otras cuatro ocasiones. Reveló, además, que su hermano
sufría de la presión.
En
San Juan de la Maguana,
la Policía
informó que el niño Mosquea Andujar, de 2 años, murió ahogado en las aguas de
una “rigola” que pasa por la parte trasera de su vivienda, ubicada en la calle La Mina, número 5, del sector
Mesopotamia de la referida ciudad sureña.
Según la investigación policial, el padre del
niño, Adalberto Mosquea Jiménez, aseguró que su hijo salió a eso de las 9:30 de
la mañana de ayer, por lo que iniciaron una búsqueda encontrándolo en la “rigola”.
Explicó que lo condujeron al hospital público Alejandro Cabral de San Juan de la Maguana, donde el médico
legista determinó asfixia por inmersión.
La Policía informó, además, la muerte de Brígida Maria Reynoso,
de 60 años, quien resultó con quemaduras eléctricas de tercer grado en el dedo
índice de la mano derecha que le produjo fernilación ventricular y paro
cardiorrespiratorio, que le ocasionaron la muerte. El caso ocurrió en la calle
Principal del sector Honduras, en Baní.
La
descarga eléctrica, según el hermano de la fallecida, Santo Florencio Santana,
ocurrió mientras ésta se encontraba lavando y metió la mano dentro de la
lavadora para sacar una ropa “quedándose pegada”. La señora fue conducida al
hospital público de Baní, donde fue declarada muerta.
En
Constanza, la Policía
investiga el tipo de sustancia que habría ingerido Félix de Jesús Disla, de 60
años, para quitarse la vida, cuyo cadáver fue encontrado dentro de la vivienda
de su hermano ubicada en El Mimero, distrito municipal La Sabina.
Los
investigadores de la Policía
tratan de establecer la sustancia que supuestamente utilizó de Jesús Disla para
quitarse la vida. Según el diagnóstico médico, el deceso del obrero se debió al
efecto de una sustancia hasta el momento desconocida.
De
Jesús Disla residía en Arroyo Frío, del distrito municipal de Tireo, en
Constanza y su cadáver fue encontrado en la vivienda de su hermano.
Mientras
que el menor Jiménez López, fue llevado muerto al Hospital Materno Infantil, de
Los Mina, Santo Domingo Este, presentando signos de asfixia por ahorcamiento,
que sufrió al colgarse de un tubo con un cordón de zapato, en su residencia
ubicada en la calle 23-D, de Los Mina. El menor se suicidó tras molestarse al
ser corregido por sus padres.
9 de enero 2012