(Ria NOvosti) Rusia comprobará la hipótesis de que radares estadounidenses
ocasionaron un efecto no deliberado en la sonda interplanetaria rusa
Fobos-Grunt poco después de su lanzamiento, comunicó hoy Yuri Kóptev,
jefe de la comisión interdepartamental encargada de investigar las
causas de la fallida misión de ese aparato espacial a Marte.
“Para comprobar la hipótesis se llevará a cabo un experimento en Tierra. Equipos similares a los instalados en Fobos-Grunt
será sometido a la emanación equivalente a la magnitud total generada
por el radares estadounidenses”, dijo Kóptev en una entrevista con RIA
Novosti.
Recordó que cinco radares estadounidenses, implicados en el estudio
de un asteroide, estaban activos en la zona que Fobos-Grunt sobrevolaba
durante su segunda vuelta alrededor de la Tierra. Agregó que el
experimento, a realizarse en los próximos días en un polígono especial,
ayudará a confirmar o a desmentir la versión de influencia no
deliberada.
Fobos-Grunt fue la primera sonda interplanetaria rusa lanzada en los
últimos 15 años. Tras despegar el pasado 9 de noviembre desde la base de
Baikonur, no pudo tomar rumbo a Marte por un fallo de motores y se
quedó orbitando la Tierra. Fragmentos del aparato cayeron en la noche
del 15 de enero sobre la parte sur del Pacífico, América del Sur y el
Atlántico.
Kóptev declaró que la comisión por él presidida sigue barajando
diversas hipótesis y espera confirmar alguna para el próximo viernes.
“No tenemos conclusiones definitivas a día de hoy”, dijo. El dictamen de
la comisión será presentado a la agencia espacial rusa Roscosmos que se
encargará de publicarlo posteriormente.
El vicepresidente del Gobierno ruso y ex embajador de Rusia ante la
OTAN, Dmitri Rogozin, también reconoció hoy que la hipótesis acerca de
los radares estadounidenses “tiene derecho a la existencia”. “Espero que
no sea así”, dijo.