La
Policía negó que el mayor general José Antonio Polanco Gómez haya dicho que esa
institucion va a enterrar a las personas que mueran en intercambios de
disparos, sino que lo que se proponen es prohibir el uso de bebidas alcohólicas,
armas de fuego.
Dijo
que la que hará la Policía es a cortejar a los sepelios para evitar que se
perturbe el orden, como ocurrió en el sepelio de un alegado delincuente en el que
fueron exhibidas armas de alto calibre en el ataúd.
El relacionista público Máximo Báez Aybar hizo
la aclaración este viernes, luego que diversos medios llamaran la atención sobre
lo atribuido al jefe de la Policía y que fue publicado en diferentes medios de comunicación.
Jefatura PN
mantendrá control en sepelios de presuntos delincuentes para preservar el orden,
y aclara responsables de los actos fúnebres son familiares.
La Jefatura de la Policía informó que esa institución no se
ha propuesto el compromiso de sepultar a presuntos delincuentes caídos en
acciones legales, sino el
establecimiento de controles para evitar la alteración del orden y
garantizar el respeto de las buenas costumbres.
Precisó que la Policía no puede permitir que amigos y
familiares de presuntos delincuentes pretendan utilizar los sepelios para
promover inconductas, que representan un mal ejemplo para toda la sociedad.
Dijo que aunque sea responsabilidad de familiares dar cristiana
sepultura a personas muertas al enfrentar agentes del orden, no es menos cierto
que la institución tiene la misión de garantizar que los demás ciudadanos no se
vean afectados durante los cortejos fúnebres.
Explicó que en los casos en que algún cadáver no sea
reclamado en el Instituto Nacional de Patología Forense, es responsabilidad de
los ayuntamientos y otros organismos gestionar la sepultura de los cadáveres.
Sostuvo que se trata
simplemente de medidas encaminadas a garantizar el respeto a las normas y
buenas costumbres de los dominicanos en esos sepelios, pero jamás de sepultar a
personas, porque ese es un asunto que no compete a la Policía Nacional como
institución.
La Jefatura de la Policía envió un memorándum a los
directores regionales, comandantes departamentales y a supervisores, para evitar
que se repitan acciones como lo sucedido en el sepelio de un hombre señalado
como cabecilla de la banda llamada "Los Chonchones", de Villa
Consuelo.
La medida policial fue adoptada luego de que familiares y
amigos de Carlos Ismael De los Santos (Boyón), muerto durante un enfrentamiento
con la Policía la noche del martes, “celebraran” el sepelio con bebidas y armas
de fuego, cinco de las cuales fueron colocadas en el ataúd.
La institución precisó que no se trata de que la Policía
se va a hacer cargo del cadáver, ni mucho menos, ni de sepultarlo, sino del
establecimiento de controles que, incluso irían en beneficio de los familiares
de las víctimas.
3 de febrero 2012