<span style="font-weight: bold;">Puerto Príncipe, 7 feb (PL) Cientos de haitianos protestaron hoy frente
al Ministerio de Justicia contra la decisión legal de descartar un
proceso contra el exdictador Jean Claude Duvalier por crímenes de lesa
humanidad.</span>
Las manifestaciones, organizadas por seis asociaciones de defensa de los
derechos del hombre, tuvieron lugar el mismo día en que se cumplen 26
años del fin de la dictadura. El juez haitiano Carves Jean consideró
la pasada semana que las violaciones de los derechos humanos cometidas
por Duvalier, también conocido como Baby Doc, estaban prescritas, por lo
que el exdictador irá a los tribunales solo por corrupción y desvío de
fondos.
La decisión de Jean contrasta con lo estipulado por el Consejo de
Derechos Humanos de Naciones Unidas, que considera imprescriptibles los
crímenes contra la humanidad.
Sobre esta base, organizaciones civiles haitianas opinan que los abusos
cometidos durante el régimen de Baby Doc, iniciado en 1979 y culminado
tras una revuelta popular en 1986, constituyen violaciones contra los
derechos humanos y son, por tanto, imprescriptibles.
La orden representa una vergüenza para la Justicia, se ha saboteado el
estado de derecho y la democracia, afirmaron los organizadores de la
protesta en un comunicado.
La víspera comenzó el proceso de apelación contra la disposición
judicial, aunque las víctimas de Duvalier aseguran no haber recibido aún
la documentación pertinente o indicaciones sobre cómo recurrir al
mecanismo legal.
Por su parte, los abogados del exdictador aseguraron que apelarán contra
la decisión porque su defendido ya fue juzgado en tres oportunidades
por desvío de fondos en Haití, Francia y Suiza.
De ser procesado por corrupción, Baby Doc enfrentaría una pena máxima de
cinco años de cárcel, aunque por su edad (60 años) y condiciones de
salud, podría ser notablemente menor o condonada.
El pasado viernes, la Comisión de Abogados por las Libertades expresó
también su conmoción por lo que definió como intentos de la Justicia
haitiana de blanquear a Duvalier y desconocer los crímenes cometidos
durante su régimen, "caracterizado por el terror, la violencia política y
el miedo".
La Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití, por su
parte, manifestó preocupación ante la posibilidad de que Baby Doc sea
indultado.
A Duvalier, que regresó a Haití el 16 de enero de 2011 tras 25 años de
exilio en Francia, se le atribuyen, entre otros delitos, casos de
violación de los derechos humanos, corrupción, asociación para delinquir
y malversación de entre 300 y 800 millones de dólares.
Organizaciones civiles haitianas estiman que durante la dictadura de
Baby Doc y de su padre, el también déspota Francois Duvalier, fueron
asesinados entre 20 mil y 30 mil civiles haitianos.
Una insubordinación militar, devenida protesta popular, conllevó al fin
de la dictadura el 7 de febrero de 1986, lo que obligó a Baby Doc a huir
a Francia, donde vivió hasta hace un año.
rmh/lio