<span style="font-weight: bold;">Bogotá, 14 feb (PL) El cuestionado excomisionado de Paz colombiano y
prófugo de la justicia Luis Carlos Restrepo atacó hoy desde la
clandestinidad al presidente de la República, Juan Manuel Santos, y
propuso una campaña en su contra.</span>
En una declaración divulgada a través del exasesor presidencial José
Obdulio Gaviria, el excomisionado llama a bloquear a través de una
Asamblea Nacional Constituyente una eventual reelección de Santos.
Con esto Restrepo da por hecho que el actual jefe de Estado se
presentará a un segundo mandato, tema al que Santos ha evitado
referirse.
Por otro lado, el exfuncionario considera que el uribismo (partidarios
del hoy expresidente Álvaro Uribe) se equivocó en elegir a Santos como
su seguidor.
"El uribismo se equivocó al elegir a Santos. En el 2010 se ganaron las
elecciones, pero se perdió el gobierno. Iniciar de inmediato una campaña
contra la reelección de Santos, bajo el lema: No a la reelección de la
mentira", recoge el texto.
Sin embargo, en su duro mensaje Restrepo no hace mención de su paradero
desde que saliera del país en enero pasado ni del proceso que avanza en
Colombia por su responsabilidad en la falsa desmovilización de supuestos
guerrilleros en 2006.
En dicho proceso ya fue acusado de los delitos de peculado por
apropiación, fraude procesal, concierto para delinquir y fabricación,
tráfico y porte de armas de uso privativo de las fuerzas militares.
Restrepo se desempeñó en el citado cargo durante el gobierno Uribe
(2002-2010), cuya administración protagonizó sonados escándalos
relacionados con ejecuciones extrajudiciales, espionaje ilegal,
corrupción y vínculos de políticos y funcionario con paramilitares,
entre otros.
La causa en su contra fue abierta ante versiones judiciales de dos
exmiembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC),
cuyos testimonios hicieron evidente irregularidades en la referida
desmovilización.
De acuerdo con esos dos exguerrilleros, los presuntos desmovilizados de
la Compañía Móvil Cacica Gaitana fueron reclutados en varios barrios de
Bogotá.
Asimismo, señalaron que el reclutamiento estuvo a cargo de una mujer,
quien los trasladó al lugar previsto para el desarme en el departamento
de Tolima, con seguimiento de Restrepo y altos mandos militares.
En su momento el proceso llamó la atención, puesto que los supuestos
desmovilizados lucían uniformes nuevos e impecables, y algunas de las
botas estaban marcadas con insignias de la VI Brigada del Ejército.
Por otra parte, algunas de las armas entregadas eran falsas, otras no funcionaban y no eran de las que suelen usar las FARC.
