Washington, 18 feb (PL) Una polémica entre el presidente Barack Obama,
los republicanos y la Iglesia Católica estadounidense pasó hoy a las
cortes federales, luego que un juez falló en contra de una ley sobre
anticonceptivos.
Un fiscal de North Carolina acogió una demanda civil, procesó el caso y
enunció que efectivamente ninguna persona o institución debe ser
obligada a proveer servicios de contracepción en detrimento de sus
libertades religiosas.
El Departamento de Justicia (DJ) también se sumó al querella política y
recomendó a los jueces norteamericanos mantenerse fuera de la
controversia hasta tanto no se alcance un compromiso oficial entre las
partes.
Todo requerimiento legal o intervención de las instituciones judiciales
debe ser pospuesto hasta enero próximo en el sentido de preparar un
espacio donde se puedan zanjar las diferencias expresadas, señaló este
sábado una nota del DJ.
Obama anunció el viernes de la semana anterior un nuevo compromiso en
relación con su plan nacional de seguros de salud y el controvertido
acápite sobre el control de natalidad, fuertemente criticado por los
republicanos.
La administración demócrata buscó disminuir el furor mediático sobre
este tema, aplacar críticas de los opositores y ganar terreno en la
simpatía popular camino a las elecciones generales de noviembre.
En una breve conferencia de prensa, donde no respondió preguntas de
reporteros, el presidente expresó que está de acuerdo en firmar una
acomodación de la ley y extender la lista de excepciones que dicta la
actual normativa.
Tras afrontar una vasta polémica incitada por la Iglesia católica y los
candidatos presidenciales republicanos, el gobernante precisó que la
legislación será actualizada y la obligación de ofrecer anticonceptivos
recaerá solamente en las compañías aseguradoras.
Antes el líder parlamentario republicano John Boehner advirtió que el
Congreso federal neutralizaría los planes de la Casa Blanca relacionados
con el nuevo programa de control para la natalidad.
En el Senado el congresista por Kentucky Mitch McConnell manifestó que
la idea del mandatario demócrata "es aberrante y está cruzando una línea
peligrosa para la democracia en el país."
Una decisión del Departamento de Salud y Servicios Humanos, basada en la
reforma sanitaria de 2010, obliga a escuelas y hospitales religiosos
dar a sus empleados acceso gratuito al control de la natalidad.
oda/jvj