Madrid, 19 feb (PL) Cientos de miles de personas desbordaron hoy las
calles de 57 ciudades españolas para mostrar su indignación con la
reforma laboral aprobada por el gobierno de Mariano Rajoy, que abarata y
facilita el despido de los trabajadores.
Bajo el lema No a la reforma laboral injusta con los trabajadores,
ineficaz para la economía e inútil para el empleo, las protestas fueron
convocadas por los dos principales sindicatos de este país, Comisiones
Obreras (CC.OO.) y la Unión General de Trabajadores (UGT).
Ambas asociaciones denunciaron que la normativa del derechista Partido
Popular (PP) apuesta por la reducción de los salarios, precariza el
empleo, acrecienta las desigualdades y conduce a un empobrecimiento
generalizado de la población española.
A juicio de los líderes de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, y de la UGT,
Cándido Méndez, la lógica de los cambios introducidos por Rajoy en el
mercado de trabajo es el desmantelamiento progresivo de los derechos
adquiridos por la clase obrera durante tantos años.
Coincidieron en que la legislación concede todo el poder a las empresas a
la hora de pactar los convenios y generará más destrucción de empleo,
en un país que ya rebasó la barrera de los cinco millones de
desempleados, la cifra más alta de la Unión Europea (UE).
Según ambos dirigentes, se trata de una modificación inútil y
desequilibrada, impuesta por la patronal española, la UE, el Fondo
Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y los gobiernos de
Alemania y Francia.
Sin embargo, el jefe del Ejecutivo español aseguró este domingo desde
Sevilla, sede de un congreso del PP, que su iniciativa "es justa, buena y
necesaria para que España deje de ser la nación europea que más empleo
destruye".
Las manifestaciones de este domingo tuvieron como epicentro esta
capital, donde se congregaron, de acuerdo con los sindicatos, medio
millón de personas, mientras que en Barcelona la marcha contó con unos
400 mil asistentes.
Además de Fernández Toxo y Méndez, la movilización de Madrid contó con
la participación de dirigentes de varios partidos políticos, entre ellos
el coordinador federal de Izquierda Unida (IU), Cayo Lara.
En declaraciones a Prensa Latina, el líder de la tercera fuerza política
en votos de España vaticinó que, lejos de crear puestos de trabajo, con
esta norma se llegará a los seis millones de desocupados al cierre de
2012.
No hemos conocido, en la historia de la democracia española, una
agresión más brutal a los derechos de los trabajadores como la del PP,
subrayó Lara.
La desregulación total del mercado laboral forma parte de la política
neoliberal pura y dura dictada por los organismos financieros
internacionales y las instituciones del llamado Viejo Continente,
sentenció el también diputado nacional de IU.
Los sindicatos anunciaron que la de este domingo será la primera de una
serie de movilizaciones contra una estrategia que nunca ataca a los
poderosos y hace recaer todo el coste de la crisis económica en quienes
no la provocaron.
En su diálogo con esta agencia, Lara afirmó que las protestas de hoy
podrían ser la antesala de una huelga general, aunque su posible
convocatoria está en manos de las centrales sindicales y no de los
partidos políticos, aclaró.