Ankara, 1 abr (PL) Los autotitulados Amigos de Siria reconocieron hoy en
Turquía a la oposición armada de ese país levantino como el gobierno
transitorio, aunque Damasco lo considera una organización terrorista y
pertrechada desde el exterior.
Representantes de 74 países árabes y occidentales, así como de
organizaciones internacionales plasmaron esa decisión en el texto final
de su segunda conferencia, celebrada en la ciudad de Estambul en busca
de nuevas maniobras para sacar del poder al presidente Bashar al-Assad.
"Reconocemos al Consejo Nacional Sirio (CNS) como el legítimo
representante del pueblo, la organización líder de todos los grupos
opositores (…) y el principal interlocutor con la comunidad
internacional", precisa el documento.
Esa resolución recoge el compromiso de apoyar las operaciones del CNS y
exhorta a desertar a quienes prestan servicios en las Fuerzas Armadas,
organismos de seguridad y oficinas gubernamentales de esa nación del
Oriente Medio.
Los llamados Amigos de Siria exaltaron el cese de las actividades
diplomáticas de varios países en Damasco y reiteraron su disposición de
alentar a otros estados a actuar de manera similar.
Constituyeron un comité para diseñar eventuales sanciones contra Damasco
y acordaron que su primer encuentro será este mes en Francia, escogida
también sede del tercer foro de esa agrupación para continuar en la
búsqueda de más presiones contra el país levantino.
Entre otros aspectos, también aprobaron la creación de un grupo de
trabajo orientado a "planificar y coordinar la recuperación económica y
el desarrollo de Siria", si logran destituir a al-Assad.
Ese buró estará presidido por Alemania y los Emiratos Árabes Unidos, y
trabajará en colaboración con los representantes designados por el CNS.
Finalmente, los Amigos de Siria convinieron en apoyar el plan de seis
puntos de Kofi Annan, enviado especial de las Naciones Unidas, para
resolver la crisis en Siria, pero exigieron a cambio fijar una fecha
límite para su aplicación.
La cita turca sesionó en ausencia de las autoridades legítimas de
Damasco, Rusia y China, países que advirtieron a los promotores del
encuentro no intrometerse en el plan pues Annan es el único con potestad
para evaluar su implementación.
Ese cónclave inició con llamados a apoyar con armas y fondos al ilegal
CNS si la comunidad internacional no actúa de forma más enérgica contra
al-Assad.
Al igual que en la primera edición en Túnez, cientos de personas se
manifestaron en Estambul a favor del gobernante sirio y contra la
intromisión extranjera en el conflicto interno de su país.
et/ymr