La Habana (PL) Después de soportar los fuertes zarpazos de la crisis
económica global, América Latina registró en 2011 un significativo
aumento en la llegada de remesas, similar a los niveles alcanzados en
2007 antes del inicio de la recesión.
Datos del Fondo Multilateral de Inversiones (Fomin) del Banco
Interamericano de Desarrollo indicaron que el pasado año los países
latinoamericanos recibieron 61 mil millones de dólares, un seis por
ciento más en relación con 2010. <br>
Las estadísticas de esa entidad
señalan que, en su mayoría, aquellos países en los cuales las economías
están más vinculadas a la de Estados Unidos tuvieron los mayores
incrementos, a diferencia de aquellos en los que la población también
tiene flujos migratorios a Europa.
Estados Unidos es la fuente de casi tres cuartas partes de las remesas
recibidas en esta región, mientras que España se sitúa en segundo lugar,
con el 12 por ciento.
Del conjunto de América Latina, sólo Brasil vio reducir el arribo de
dinero, que bajó de un 4,9 por ciento hasta los mil 974 millones de
dólares, como consecuencia del boom económico del país, que ha motivado
que muchos brasileños opten por regresar.
También se debió al fuerte crecimiento de las transferencias de
emigrantes de Brasil, o sea los envíos que suelen realizar los
trabajadores extranjeros cuando deciden retornar a sus países de origen,
que en 2011 se ampliaron 51 por ciento, casi dos mil 100 millones de
dólares.
En general, Suramérica recibió un cuatro por ciento más que en 2010,
hasta los 16 mil 707 millones, con alzas de 9,1 por ciento en Paraguay,
7,8 en Bolivia, 7,5 en Chile, 7 en Venezuela, 6,5 en Argentina y 6,4 en
Perú.
No obstante, las oscilaciones cambiarias, la inflación y la
incertidumbre económica de Europa afectaron el valor del dinero enviado
por los emigrados, aunque en menor medida que en otros años.
La difícil situación económica española hizo que en particular bajaran las remesas hacia Ecuador, Colombia y Bolivia.
De todas formas en los últimos años en la misma medida que muchas
economías de la región ganaron en fortaleza y recuperación, la llegada
de dinero desde el exterior representa hoy una parte menos significativa
del producto interno bruto (PIB).
Algo que todavía no ocurre en algunos países de Centroamérica y del
Caribe, como por ejemplo Haití, donde aún es más del 10 por ciento del
PIB.
Datos del Banco Mundial ratifican el peso que tuvieron las remesas en
2011, las cuales en los países en desarrollo llegaron a 351 mil millones
de dólares, lo que significó un incremento del ocho por ciento en
relación con el calendario precedente.
Es significativo que su comportamiento en México le permitió mantenerse
como el tercer principal receptor de esas partidas en el mundo, luego de
India y China.
<span style="font-weight: bold;">MUJERES CON MAYOR PESO EN LAS REMESAS</span>
El sector con mayor impacto en el envío de dinero entre los emigrantes
latinoamericanos durante 2011 fueron las mujeres, ya que la movilidad
laboral está a su favor, o sea hubo una mayor demanda de fuerza laboral
femenina.
Para el director del Programa de Remesas y Desarrollo del Diálogo
Interamericano, Manuel Orozco, el porcentaje de migración femenina con
educación superior es mayor que el de hombres.
Según apreciación de este especialista, cada vez más las féminas están
emigrando hacia países con salarios altos e insertándose en el mercado
laboral de diversas industrias y en campos como el empleo doméstico, en
textiles y prendas, entretenimiento, agricultura y administración
En ese sentido, explicó, que las mujeres actualmente representan el 50
por ciento del total de la población emigrante, por lo que ha cambiado
la dinámica de género en el envío de remesas y lazos trasnacionales.
Comentó que por lo general entre inmigrantes, las mujeres tienden a
enviar menos dinero que los hombres, sin embargo, cuando ellas tienen
educación superior remiten lo mismo o más que sus pares.
Adicionalmente el sector femenino emigrante tiende a asumir más
obligaciones que sus homólogos masculinos, en parte debido a los
cuidados a sus padres y hermanos o hijos. Pero los hombres también
tienen hijos que son atendidos por una mujer de su familia.
<span style="font-weight: bold;">TENDENCIAS EN EL ENVIO DE REMESAS</span>
De acuerdo con Fomin, la tendencia del crecimiento en los recursos
asociados a las remesas no solamente fue observada en los montos totales
agregados, sino también en términos de su periodicidad y del monto
promedio enviado.
Tales movimientos contrastaron en 2011 con los registrados en 2009 y
2010, durante los cuales los países de destino sufrieron las
consecuencias de un menor número de envíos (de 15,3 anuales pasaron a 12
envíos), así como en el monto menor que se redujo a un nueve por
ciento.
El incremento de las remisiones a América del Sur no fue tan sostenido
como el experimentado en otras regiones e, incluso, para el tercer
trimestre de 2011 se redujeron asociado a que muchas provienen de la
Unión Europea, importante destino de los emigrantes.
En términos anuales, en 2011 el crecimiento de las remesas que recibió
la subregión suramericana fue de cuatro por ciento, la tasa más baja
observada en América Latina y el Caribe.
Las proyecciones macroeconómicas relativamente positivas para EE.UU.
podrían indicar una posible tendencia al crecimiento de las remesas para
2012, en correspondencia con un avance de la producción y el empleo.
Al anticiparse incrementos económicos en Suramérica, el envío de dinero
intra-regional asociado a la migración laboral podrían compensar en
parte las caídas en los volúmenes de remesas provenientes de los países
europeos, sin llegar a contrarrestarlas.
De ahí que la mencionada dependencia del BID prevé para 2012 un alza
similar de las remesas al año anterior, entre seis y siete por ciento de
incremento.
* Periodista de la Redacción América del Sur de Prensa Latina.
