<span style="font-weight: bold;">3 de abril 2012.-A pesar
del impacto negativo de los precios internacionales del petróleo, en los
últimos ocho años el gobierno del doctor Leonel Fernández ha duplicado la
capacidad de generación del sistema eléctrico dominicano, inyectándole la mayor
cantidad de energía que se adiciona a lo largo de la historia, a la vez que deja
trazado el camino para que en un tiempo relativamente corto los apagones queden
conjurados definitivamente.</span>
Así lo
expusieron Celso Marranzini, vicepresidente ejecutivo de la Corporación
Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE); Enrique Ramírez,
presidente de la Comisión Nacional de Energía (CNE) y Juan Bautista Gómez,
superintendente de Electricidad, al participar en el programa “Rindiendo
Cuentas al pueblo dominicano”, que se difunde por una cadena de medios
electrónicos que tiene a Telemicro Canal 5 como emisora matriz.
Los
principales funcionarios del sector eléctrico precisaron que entre el 2004 y el
2012 el sistema creció en un 197 por ciento, con la particularidad de que ese
avance incluye la entrada de 303 megas de energía renovable, lo que implica un
gran impulso a la preservación del medio ambiente.
Destacaron
que uno de los logros más importantes fue la promulgación, por parte del
presidente Fernández, de la Ley 57-07, con la que el presente gobierno ha
sentado las bases para que el país alcance en poco tiempo la autosuficiencia en
materia de generación de energía eléctrica sin ocasionar graves daños al
ambiente.
Dijeron
que producto de esa ley, se ha invertido cerca de 905 millones de dólares en
instalaciones para la producción de energía renovable, lo que significa que
alrededor de 670 mil dominicanos van a ser abastecidos con fluido eléctrico
proveniente básicamente del sol y los vientos.
Además de
los que están en funcionamiento, actualmente están en marcha varios proyectos
de energía renovable que cuando entren en funcionamiento el país importará 3
millones 150 mil barriles menos de petróleo, algo que los funcionarios del
sector eléctrico definen como una verdadera revolución en termino de
importación de carburante.
Mientras,
se ha llamado a una licitación de alcance internacional para adquirir hasta mil
500 megas a gas natural y a carbón con el objetivo de producir suficiente
energía barata y limpia y de esa manera poner fin a los apagones que padece el
país desde hace más de 40 años.
En
adición a los citados esfuerzos, los funcionarios destacaron que el sistema de
transmisión de electricidad cuenta ahora con una autopista eléctrica que
facilita el transporte del servicio hacia la región del Cibao, en tanto que el
sistema hidráulico aumentó su capacidad de generación en un 20 por ciento, la
cantidad de clientes se incrementó en un 197 por ciento y el 50 por ciento de
los dominicanos disfruta de electricidad las 24 horas del día.
De igual
manera, dijeron que en estos últimos ocho años la administración del presidente
Fernández ha otorgado licencia de usuario no regulado a 111 industrias que
consumen por encima de 100 kilos, a los fines de que puedan comprar la energía
directamente a los generadores, lo que implica una baja significativa en los
precios de compra de energía.
Asimismo,
señalaron que el gobierno ha otorgado incentivos por un monto aproximado de 850
millones de pesos a personas que han querido instalar sistemas de energía
renovable en sus casas o negocios, algunas de los cuales ya venden excedente a
las empresas distribuidoras de electricidad, que es otro de los elementos
nuevos del sistema.
Los
funcionarios del sector eléctrico informaron que entre el 2004 y el 2012 el
gobierno ha tenido que erogar 53 mil 800 millones de pesos para no traspasarles
a los usuarios el costo real de la tarifa eléctrica, la cual debió aumentar
significativamente a consecuencia del alza que ha experimentado el barril de
petróleo, el cual pasó de 22 dólares en el 2005 a 112 en el 2012.
Revelaron
que solo en el 2011, el gobierno tuvo que erogar 16 mil 200 millones de pesos
por ese concepto, lo que ha significado una carga fiscal significativa para la
presente administración.
Marranzini,
Ramírez y Gómez también resaltaron que además de contar con suficiente
capacidad instalada para producir la energía que demanda la población, el
sistema eléctrico dominicano dispone ahora de una reserva estratégica de entre
500 y 600 megas para hacer frente a cualquier contingencia o salida de alguna
planta para fines de mantenimiento.
En el
transcurso de la entrevista, conducida por los comunicadores Ruddy González y
Yolanda Martínez, se corrieron sendos reportajes sobre la Autopista Eléctrica
del Cibao, el parque eólico de 300 megas inaugurado recientemente en Pedernales
y las distintas empresas hidroeléctricas que funcionan en el país, varias de
las cuales han sido construidas durante la gestión del presidente Fernández.
AUTOSUFICIENCIA EN GENERACION
El
licenciado Celso Marranzini, vicepresidente ejecutivo de la CDEEE, dijo que en
el 2004, cuando el presidente Fernández retornó al poder, el sistema eléctrico
arrastraba deudas por más de 400 millones de dólares y apenas tenía 650 mil
clientes, por lo que las pérdidas sobrepasaban el 47 por ciento.
El
funcionario recordó que como resultado de las serias deficiencias que
arrastraba el sistema eléctrico, en el período 2000-2004 se produjeron 31
“blackout” (apagones generales), ocasionando efectos demoledores en la
producción y en el desenvolvimiento de las actividades cotidianas.
En lo
concerniente a la administración de las empresas distribuidoras de
electricidad, Marranzini recordó que, como resultado del proceso de reforma
realizado a partir del 1997, las del Sur y el Norte pasaron al control de la
firma española Unión Fenosa, proceso que fue revertido en el 2003, volviendo a
manos del Estado.
Agregó
que en el caso de Edeeste, esta pasó a manos del Estado de nuevo en el año
2008, por lo que las tres dejaron de ser empresas mixtas y actualmente son
manejadas completamente por el Estado, a través de la CDEEE y el Fondo
Patrimonial de las Empresas Reformadas (FONPER).
Dijo que
uno de los inconvenientes encontrados en el 2004 es que cada una de esas
distribuidoras tenía una política diferente y no había homologación en los
materiales que se compraban, elemento que también generaba pérdidas al Estado.
Al
referirse al problema de los apagones, el funcionario sostuvo que, contrario a
otros tiempos, ahora no se producen interrupciones por incapacidad de
generación de electricidad, sino por falta de pago por parte de una buena
proporción de los consumidores.
Dijo que
antes del 2004 tampoco se ejecutaba un programa de impacto como lo es el
Bonoluz, mecanismo a través del cual el actual gobierno subsidia el consumo de
electricidad a miles de hogares pobres del país, lo que significa un gran
sacrificio económico para la presente administración.
En cuanto
a los clientes, dijo que en la actualidad el número ha subido a más de 2
millones 160 mil, de los cuales cerca de 850 mil goza de servicio de 24 horas,
con tendencia al incremento.
De igual
manera, Marranzini destacó que las perdidas, que en el 2004 rondaban el 47 por
ciento, en febrero de este año terminaron en un 27 por ciento, lo considera una
merma significativa.
“Realmente,
ahora tenemos capacidad para dar energía las 24 horas en todo el país, pero
desgraciadamente, aquí hay circuitos donde, o por falta de pago, o por la mala
calidad de las redes, nosotros no tenemos capacidad de dar 24 las horas”,
indicó el vicepresidente ejecutivo de la CDEEE.
Explicó
que el sistema tiene cuatro tipos de circuit uno de 24 horas, en el que el
nivel de servicio está en cerca de un 99.8 por ciento; otro de 20 horas y los
otros dos de 18 y 14 horas de servicio, respectivamente.
El
funcionario consideró injusto que las personas que pagan regularmente el
servicio energético sean penalizadas por culpa de sus vecinos que no lo hacen,
pero afirmó que el sistema fue concebido así, por lo que la respuesta que da el
presente gobierno a esa situación es convertir cada vez más circuitos en 24
horas.
A ese
respecto, resaltó que ya hay casi 850 clientes que reciben energía a tiempo
completo, entre ellos todos los de la provincia Hato Mayor, y dijo esperar que
al terminar el presente año el número de los que disponen de esa facilidad suba
a 200 mil.
De igual
manera, el funcionario negó que la de República Dominicana sea la energía más
cara del mundo, como afirman algunos. “Hay un pequeño porcentaje de la
población que paga demanda que realmente está penalizada, pero el 80 por ciento
de nuestros clientes apenas paga 11.7 centavos de dólar, que es una de las
energías más baratas de la región”, dijo.
Marranzini
también resaltó que como muestra de su notable fortalecimiento institucional,
la CDEEE implementa el Sistema Aplicaciones y Productos (SAP), un servicio de
cómputos muy avanzado, donde se tiene información financiera y comercial al
día, lo cual redunda en una mejoría significativa de la calidad del servicio
que recibe el cliente.
AVANCES EN ENERGIA RENOVABLE
En lo que
respecta a la generación de energía renovable, el vicepresidente ejecutivo de
la CDEEE explicó que dentro de dos o tres meses se va a tener 800 megas, lo que
contribuye a la reducción de la factura petrolera y al saneamiento del medio
ambiente.
Entre esos
parques, el funcionario citó el de Los Mina, que ahora funciona a gas natural y
que aporta 220 megas al sistema. A esto se adicionan 430 megas de las plantas
Quisqueya I y 2, otros 25 de las empresas Cesar Iglesias, 60 megas de la
empresa Laesa y 108 de la compañía SEABOARD que se inauguraron la semana
pasada.
“Todo eso
va contribuyendo a la estabilidad del sistema”, declaró Marranzini, tras
informar que la Compañía de Electricidad San Pedro de Macorís (CESPM, antigua
Cogentrix), se utiliza solo como reserva, mientras se dan los pasos de rigor
con miras a convertirla a gas natural, lo que constituirá otro gran paso de
avance.
“Si
comparamos los números del 2004 a los números del 2011, indudablemente que el
sistema eléctrico dominicano ha tenido una mejoría considerable”, proclamó
Marranzini.
<span style="font-weight: bold;">CAMBIO EN LA ESTRUCTURA DEL SUBSIDIO</span>
En su
intervención, el vicepresidente ejecutivo de la CDEEE también se refirió al
subsidio que otorga el gobierno al sistema eléctrico y sobre el particular
explicó que, contrario a otros tiempos, ahora no se subsidia la ineficiencia,
sino a los consumidores, para que la factura les llegue más barata.
Explicó
que para ese ejercicio, el gobierno creó el Fondo de Estabilización de la
Tarifa Eléctrica (FETE), el cual cubre la diferencia entre el costo real de la
energía y la factura que paga el cliente.
Marranzini
aseguró que de 855 millones de pesos destinados en el 2011 para el subsidio,
apenas 325 millones fueron para cubrir déficit del sistema, mientras que los
restantes 530 millones se destinaron a beneficiar directamente a los
consumidores.
Indicó en
que en el presente año, con un barril de petróleo que promedia los 112 dólares,
el gobierno ha estimado un déficit de 690 millones de dólares, suma que va
directamente a subsidiar al consumidor.
El
funcionario fue enfático en afirmar que, sin el subsidio que otorga el
gobierno, la factura eléctrica tuviera que ser incrementada en un 18 por
ciento. “Es decir, que ninguna administración, en ningún tiempo, había sido tan
consecuente con los usuarios que consumen menos de 200 kilos de electricidad”,
afirmó, a ese respecto, el superintendente de Electricidad, Juan Bautista
Gómez.
Retornando
a Marranzini, este dijo que, conforme a lo proyectado por el gobierno, la
matriz energética de República Dominicana debe ser eficiente, con combustibles
baratos y con tecnología de última generación.
Opinó que
en lo inmediato, la matriz de generación se debe componer de un 35 por ciento
gas natural, 35 a 40 por ciento de carbón mineral, 25 por ciento de energía
renovable, y un 5 por ciento de fuel-oil o gasoil.
<span style="font-weight: bold;">IMPACTO DE LA LEY 57-07</span>
De su
lado, el licenciado Enrique Ramírez, presidente de la Comisión Nacional de
Energía (CNE), narró que en el 2004, cuando se inició la actual gestión, esa
institución “estaba en pañales”, pues carecía de estructura organizativa,
personal técnico e información estadística. “La Comisión Nacional de Energía en
ese momento, en termino organizativo, no existía”, señaló.
Sostuvo
que, en el cumplimiento de su rol fundamental de trazar las políticas
energéticas del Estado, la CNE ha centrado sus esfuerzos en promover la energía
renovable, lo mismo que el ahorro y la reducción de los costos.
Ramírez
informó que como una manera de predicar con el ejemplo, la CNE instaló 22 kilos
en paneles solares, sistema que le garantiza electricidad las 24 horas del día.
“La CNE
no tan solo es un gran edificio eficiente y moderno, sino que también dispone
de una estructura organizacional modelo, secundado por el Ministerio de
Administración Pública”, puntualizó el funcionario del sector energético.
Afirmó,
sin embargo, que la iniciativa de mayor impacto ha sido la elaboración y puesta
en funcionamiento de la Ley 57-07, promulgada por el presidente Fernández en el
año 2007. “Esa ha sido la gran revolución y la gran responsabilidad de un
presidente para con su país”, declaró.
Afirmó
que los parques eólicos que están siendo instalados son fruto de esa
legislación. Lo propio ocurre con una gran cantidad de paneles solares y otros
equipos de energía alternativa que han sido importados por los llamados
auto-productores.
El
presidente de la CNE expuso que al amparo de esa ley se construyó en Pedernales
un parque eólico de 33 megas, mientras se construye una segunda etapa de otros
52 megas.
De igual
manera, informó que en Bani se inició un parque eólico de 30 megas y en
Montecristi y Monte Plata se proyecta instalar otros dos de 50 y 30 megas,
respectivamente.
“Esa
visión del presidente de mandar esa ley provocó que esos auto-productores
criollos que se han levantado y han instalado un sistema de energía en su casa,
puedan vender energía al sistema a través del Reglamento de Medición Neta que
fue lanzado por la CNE, en coordinación con la CDEEEE y la Superintendencia”,
dijo.
Afirmó
que el Sistema de Medición Neta también provocó que se rompiera el monopolio en
la generación, al extremo de que ahora cualquier persona, desde su casa y con
un sistema de paneles, puede convertirse en una generadora y venderle a las
distribuidoras como lo hacen las grandes empresas del sistema.
Ramírez
precisó que a través de paneles solares se está inyectado a la red cerca de
medio mega, con la proyección de que a final de año será de un mega y medio.
“Realmente, ha habido una revolución fruto de esa ley”, proclamó el
funcionario.
<span style="font-weight: bold;">EFECTIVIDAD DE PROTECON</span>
En tanto
que el ingeniero Juan bautista Gómez, superintendente de Electricidad, aseguró
que hasta el 2004, esa dependencia operaba con serias debilidades
institucionales que le impedían cumplir efectivamente su rol de órgano
regulador que debe velar por el sistema.
“Había
una estructura organizativa muy floja para lo que debe ser un órgano regulador
del sistema eléctrico de un país donde todos sabemos que el sistema tiene
algunas limitaciones al día de hoy todavía, aunque hemos avanzado enormemente”,
expuso.
Reveló
que el promedio de interrupciones era de 6.2 horas al día, mientras que la
deuda lo agobiaban y la gente que iba a hacer sus reclamos en la oficina de
Protección al Consumidor (PROTECON) no encontraban una atención adecuada.
Asimismo,
informó que ahora PROTECON tiene 18 oficinas ubicadas estratégicamente en el
territorio nacional para facilitar que los usuarios hagan sus reclamos y se les
dé la atención adecuada.
Dijo que
en efecto, se han atendido 141 mil reclamos en los últimos ocho años, un número
que los funcionarios del sector eléctrico consideran bajo en relación con el de
clientes, que es de 2 millones 160 mil.