Cartagena de Indias, Colombia, 9 abr (PL) El foro social de las
Américas, previo a la VI Cumbre, abrió hoy sus puertas en esta ciudad
con un nuevo récord en cuanto al número de periodistas, al registrar más
de mil 400 comunicadores acreditados para la cita.
Esa cifra supera las estadísticas de la edición anterior, que se realizó
hace tres años en Ciudad de Panamá y recibió a un millar de reporteros.
Acorde con un reporte de los organizadores de todo el evento, que
concluirá el próximo domingo, el 53 por ciento de los periodistas
inscritos a la presente cita proceden de medios extranjeros, mientras el
47 por ciento restante son nacionales.
De ese total, el 43 por ciento labora para televisión, seguidos por los
de prensa escrita con un 28 por ciento, un 18 para radio y otro 18 por
ciento para medios de comunicación por Internet.
En tanto, el 73 por ciento de los corresponsales registrados son
hombres, mientras el 27 restante son mujeres, quienes ya se desplazan
por los rincones de la ciudad fuertemente custodiada y engalanada para
la ocasión.
Cartagena de Indias vive su propia metamorfosis temporal, al decir de
sus habitantes, pese a estar habituados a la afluencia de turistas que
llegan a esta ciudad del Caribe colombiano.
En un recorrido por sus calles, Prensa Latina constató una ausencia
significativa de los singulares vendedores ambulantes que
tradicionalmente se ven en otras ciudades del país, ante lo cual uno de
los transeúntes consultado nos aclaró que para la ocasión fueron
retirados de sus habituales puestos.
Esto generó, nos comentó, cierto malestar entre el gremio, que oferta
desde un simple café hasta el más insospechado objeto artesanal o
decorativo.
Incluso entre los habitantes circuló el rumor que las playas serían
cerradas al público por la Cumbre, pero el comandante de la Policía
regional, brigadier general Ricardo Restrepo, aclaró hoy que no es
cierto.
Contrario a algunos rumores, las personas que deseen ir a las playas
podrán hacerlo libremente, pues estas no tendrán ningún tipo de
restricciones en la semana que inicia, expresó.
El oficial también pidió por anticipado disculpas a los cartageneros
ante los constantes controles que se harán en el centro de la ciudad,
como parte de las medidas de seguridad para el evento.
Restrepo también indicó que esos operativos no tienen la intención de
generar restricciones extremas en materia vehicular y aseguró que en
nada buscan obstaculizar a los ciudadanos que necesiten ir a pasear o a
trabajar al centro.
Sin embargo, resulta casi una tarea titánica encontrar en la calles de
la ciudad amurallada una empanadita casera, de precio asequible para la
mayoría, o escuchar al vendedor que la pregona.