Buenos Aires, 10 may (PL) Para las izquierdas latinoamericanas la prioridad en estos momentos es volver a construir un proyecto estratégico y hacerlo de forma colectiva, opinó hoy en esta capital el académico, diplomático y reconocido escritor panameño Nils Castro.
Los principios éticos para elaborar este plan resultan claros para todos: justicia, equidad e inclusión social; lo que no está definido es el modo de construirlo y eso sólo puede lograrse colectivamente, insistió Castro en entrevista con Prensa Latina.
Nadie, desde ningún sectarismo, puede llegar a construir un proyecto de estas características, aún cuando puedan existir varios "borradores" y coincidencias respecto hacia dónde queremos marchar, que es en dirección a un sueño factible, pero también sustentable, apuntó.
Ganador en 2012 del Premio Pensar a Contracorriente, el también cofundador de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (COPPAL) llegó aquí para presentar hoy su libro "Las izquierdas latinoamericanas en tiempo de crear".
Un texto que, según realza en el prólogo el asesor especial de política exterior de Luiz Inacio Lula da Silva y de la presidenta brasileña Dilma Roussef, el catedrático Marco Aurélio García, puede catalogarse como un ensayo en el que se funden la precisión factual con la agudeza de los comentarios.
El libro, que terminó de escribir hace dos años, "no es la historia de las izquierdas latinoamericanas ni mucho menos", esclareció el autor.
Se trata, acotó, de una recapitulación de algunas de las experiencias paradigmáticas y aleccionadoras en la evolución de las izquierdas de la región a las cuales adicionamos algunas apreciaciones sobre qué las desató y, en muchos de los casos, cuáles fueron los factores que impidieron coronarlas con éxito.
En ese sentido significó la notable presencia de la Revolución cubana en la obra, en tanto acontecimiento que abrió una nueva época en la historia de las ideas y las prácticas políticas en América Latina.
Sin duda, la gesta revolucionaria de la isla fue por varios lustros "el estímulo que más contribuyó a impulsar otros desarrollos creativos del pensamiento y la movilización política de las izquierdas latinoamericanas", destaca el texto.
De hecho, subrayó Castro, el libro comienza y termina citando el ensayo Nuestra América, del Héroe Nacional cubano José Martí, quien ya desde 1891 advertió que la reflexión latinoamericana debía reemplazar al conocimiento exótico.
"Injértese en nuestra repúblicas el mundo; pero el tronco ha de ser el de nuestras repúblicas", dijo Martí, quien impulsó el pensamiento latinoamericano contemporáneo y postuló la necesidad de organizar un partido político para alcanzar la emancipación frente al colonialismo español y la previsible hegemonía estadounidense.
Por otra parte, abundó Castro en su diálogo, el libro aborda también la vigencia y funcionalidad del sistema político latinoamericano; la necesidad de rehacer la cultura política, así como de reformar la democracia para hacerla más participativa.
"Las izquierdas latinoamericanas en tiempo de crear", valoró, tiene en general un saldo optimista y deja en claro que estas fuerzas políticas viven en la actualidad un proceso de renovación, con características diferentes en cada país y según la naturaleza de sus procesos nacionales.
A los gobiernos progresistas surgidos en las últimas décadas en la región les ha tocado reparar los dolorosos estragos ocasionados por el tsunami neoliberal, y aunque saben que deben hacer ahora, no tienen un horizonte de transformaciones sociales como el que creíamos tener en las décadas del 60 y el 70, opinó.
La izquierda -sentenció- está probando vías para llegar a un ideal; trabaja en el campo de la incertidumbre y la experimentación, mientras que la derecha sólo tiene que reciclar lo ya existente para mantener el orden vigente, cuenta con los instrumentos para hacerlo y son todos "accionistas de las mismas corporaciones".