Mi
amiguito Angel Franco es un buen locutor dominicano. Un día se propuso
ser escritor de un tema que vendiera mucho. Franco, buen locutor, se
inclinó por la estratégica mediática del choque, el aparataje del
conflicto, con la finalidad de llamar la atención y que la gente saliera
a buscar su libro, para saciar ese morbo de titulares y contenidos a
que los medios le han acostumbrado y que Mario Vargas Llosa describe tan
bien en su reciehnte ensayo periodístico La Civilización del Espectáculo.
Pero
entre en deseo de ser comprado, aun en base a un tema tan escandaloso
como levantar la defensa del machismo, la discriminación de género y la
homofobia, (a lo que tiene derecho), y el transformarse en un
manipulador, chantajista y mentiroso, hay una leve diferencia.
Me
da mucha pena la transformación del buen locutor Angel Franco, (con
quien trabajé en la mejor época que tuvo Cadena de Noticias) en un
frustrado escritor de una pésima edición (en cuya portada firma como si
fuera un artículo "Por Angel Franco"), lo que apunta su falta se
sentido y preparación para estar a la altura de un ser de las letras.
Me
da verguenza por el buen locutor Angel Franco, quien sostiene que los
feminicidios (asesinatos de mujeres) se deben a la desesperación de los
pobres hombres desesperados y atacados por fiscales y juezas mujeres
(feministas) que los atacan mucho y no comprenden la indefensión en que
se encuentra el sexo fuerte.
Me apena que alguien se atreva a decir lo que dice nuestro amigo.
Recibimos
su libro y lo publicamos como tratamos a los materiales de ese orden:
como un libro de unn autor nuevo, publicamos su portada, su nombre, el
tipo de tema que, sin caersele la cara, trata y dimos nuestra opinion
como hacemos con todos los demás ya que como periodista orientado a los
libros, tenemos el derecho de opinar lo que nos parece.
A
Franco no le agradó que no fuera una página completa (como hacemos con
libros realmente importantes por sus aportes, su novedad en la narración
y el enfoque serio de temas y problemas).
Me da verguenza su homofobia y no entiendo que proceso hubo de producirse en su vida para que llegara a estas posturas.
Creo
que algo le ha ocurrido con el mundo GLTBI (le recomiendo que busque lo
que significan estas siglas), para que ahora se sienta de esta forma.
No se lo que habrá sido, pero algo le ocurrió.
Me
apena por él que tenga que utilizar una carta manipuladora al director
del diario El Nacional, para quejarse porque su libro no mereció, de
nuestra parte, el despliegue que él como autor entiende (pagado de si
mismo) que se merecía.
Me
da hasta verguenza por el mismo, que tenga que apelar a la mentira,
diciendo en su lamentable cartita, que el autor de estas lineas le
manifestó que era gay, lo cual es falso y que de ser cierto no
tendríamos ningún problema en expresarlo.
Querido
amigo, no concuerdo con sus posiciones, pero sepa que le
entiendo.Losiento a usted como un ser tan solitario, dolido y
desamparado…
No le guardo rencores ni le tomo en cuenta sus acciones obviamente dirigidas a promover su libro, para ver si se vende.
Le he hecho un trabajo de una página, que su libro no merece. Usted mismo se sorprendió. Ojalá que le vaya bien con su venta.
Pero
es una pena que, mientras en el país se asesinan dos mujeres
diariamente por parte de hombres que piensan como usted (solo que
deciden llevar sus criterios machistas hasta las ultimas consecuencias)
se haya escrito un monumento al regresionismo como ese libro, de cuyo
titulo prefiero no acordarme.