<span style="font-weight: bold;">HIGUEY, Prov. La
Altagracia, R.D._ El candidato presidencial del Partido Revolucionario
Dominicano, Hipólito Mejía, imploró ante la la Virgen de la Altagracia en la Basilica de Higuey para que ilumine a los mas de seis millones de dominicanos y dominicanas convovados a las urnas el proximo domingo.</span>
Mejía pidió al electorado nacional,
en especial a las mujeres y jóvenes, acudir a las urnas de manera pacífica, ordenada y masiva a ejercer
libremente su derecho al voto, rechazando las influencias y sobornos del
gobierno y el Partido de la Liberación Dominicana.
El candidato
perredeista acudió, junto a su familia, a la Basílica Nuestra Señora de
La Altagracia, desde cuyo Altar dirigió un mensaje durante la celebración de
una misa por la unidad familiar, en el cual dijo, que desde el
poder propiciaría la reconciliación y armonía de la familia dominicana,
perdonando a quien haya que perdonar, siempre apegado a la Justicia y la paz.
Mejía, quien ejerció
la presidencia de la República en el período 2000-2004, expresó que a
unas elecciones se va a ganar o a perder, y que cualquier que sea el resultado debe
ser acogido en paz y tranquilidad.
El candidato
presidencial perredeísta subió al púlpito atendiendo a una invitación del
rector del majestuoso templo católico y santuario de oración de la feligresía
cristiana, reverendo Evaristo Areché, quien le había solicitado dirigirse
a los asistentes al culto religioso, la que aceptó , dando muestras de
solemnidad y reverencia ante la virgen de La Altagracia, considerada madre
espiritual de los dominicanos.
Previo al uso de la
palabra, Mejía, su esposa Rosa Gómez e hijos, quienes ocupaban asientos en
primera fila, recibió la santa comunión, e hizo renovación de su fe católica,
saludando y besando la imagen de Nuestra Señora de La Altagracia, al pie del
imponente Altar construida de Caoba centenaria.
El candidato del
PRD dijo que por fe, vocación, formación y mandato divino es, junto a su
familia, un ferviente devoto de la Madre Espiritual del pueblo dominicano y que
por esa razón quería sumarse a la jornada de oración convocada por los Obispos
del país a través de la Conferencia del Episcopado Dominicano, para que las
elecciones del próximo domingo se desarrollen de manera civilizadas y pacífica.
“Desde este lugar
llamó a todos mis conciudadanos a que acudamos masivamente a las urnas el
próximo domingo, a ejercer libremente el voto de manera pacífica y armónica”,
precisó Mejía, quien al término de su intervención recibió un cerrado aplauso
de la feligresía que abarrotaba el sagrado templo.
El candidato del PRD
denunció, al propio tiempo, que el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y
el gobierno continúan empleando métodos represivos y de extorsión, con el
propósito de tratar de revertir lo que a su juicio es una decisión invariable
del pueblo dominicano, de acudir masivamente a votar para propiciar un verdadero
cambio en paz.
Dijo el ex presidente
Mejía, que a pesar de esos intentos “el pueblo dominicano espera que estas
elecciones sean libres y pulcras y que, como han pedido nuestros obispos, se
desarrollen de manera pacífica y transparentes”.
Refirió que cuando le
correspondió organizar las elecciones, no acudió a métodos como los actuales,
porque con ello se atenta contra la voluntad popular y, con ello, contra la
institucionalidad democrática del país.
La eucaristía fue
concelebrada por los sacerdotes Jorge Reyes, de la parroquia Santa Rosa, de La
Romana, y Evaristo Areché, rector de la Basílica de Higüey.
El oficio religioso
fue celebrado a intención de la unidad de la familia y por el descanso eterno
de varias personas fallecidas, entre ellas, don Silvestre Antonio Guzmán
Fernández, fallecido trágicamente cuando ejercía la presidencia de la
Republica.
El padre Reyes saludó
la presencia de Hipólito Mejía en la Basílica, señalando que era una muestra de
su vocación católica e interés por adherirse al mensaje de los obispos.
El sacerdote católico
dijo que Mejía ha logrado impregnaren su familia la fe cristiana y que eso le
ayuda a sortear dificultades propias de un proceso electoral que, a su juicio,
ha estado cargado de campaña sucia e insultos.
El reverendo pidió al
electorado ejercer un voto de conciencia, rechazar la venta o alquiler de su
cédula y no dejarse influenciar por quienes no quieren perder las elecciones.
En el acto religioso,
Mejía estuvo acompañado de la ex primera dama Rosa Gómez de Mejía, y sus hijos
Ramón Hipólito, Carolina y Felipe, quienes a su vez asistían acompañados de sus
consortes. También estuvieron algunos de los nietos de la familia Mejía-Gómez.
Antes de asistir a la
ceremonia celebrada en la Basílica de La Altagracia, el candidato presidencial
perredeísta encabezó sendas caravanas en las cercanas provincias de Hato Mayor
y El Seybo, en las que movilizó a miles de personas.