La cantidad de hombres ascienden a 4 millones 739 mil 38 (50.17%) a 2010, y la de mujeres a 4 millones 706 mil 243 (49.83%), una diferencia de 32 mil 795 hombres más que mujeres, atribuido al proceso migratorio en el país.
24 de mayo 2012.-La República Dominicana tiene una población de 9 millones 445 mil 281 personas, más hombres que mujeres y un proceso de envejecimiento poblacional, según los resultados definitivos del XI Censo Nacional de Población y Vivienda 2010 revelados la mañana de este jueves por el ministro de Economía junto al director de la Oficina Nacional de Estadística (ONE).
La cantidad de hombres ascienden a 4 millones 739 mil 38 (50.17%) a 2010, y la de mujeres a 4 millones 706 mil 243 (49.83%), una diferencia de 32 mil 795 hombres más que mujeres, atribuido al proceso migratorio en el país en los últimos años.
El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Temistocles Montás, presentó los resultados en el Salón Verde del Palacio Nacional acompañado del director de Estadística, Pablo Tactuk yde representantes de organismos nacionales e internacionales.
La Unidad de Comunicaciones del Ministerio informó que estuvieron el representantes del BID en el país, Manuel Labrado; de la Unión Europea, Irene Horejs, y del PNUD en el país, Valerie Julliand.
La población urbana al 2010 es de 7 millones 23 mil 949 personas y la rural 2 millones 421 mil 332 que, comparado con el 2002, resulta en una tasa de crecimiento anual de 3.13% de la población urbana y de 3.10% en la rural, negativa.
En la zona urbana en el país viven 74.4 de cada cien dominicanos y dominicanas y en la rural 25.6%. Estas estadísticas, comparado con las del censo de 2002, muestran que en ese lapso la población urbana ha tenido un crecimiento importante.
En la zona urbana vivía el 63.6% de la población de acuerdo con el censo de 2002 y ahora el 74.4% en el de 2010, mientras que en ese periodo la población rural registra una caída al pasar de 36.4% en 2002 a 25% en 2010.
La mayor tasa de crecimiento poblacional por edad a 2010 y con relación a 2002 está entre las personas de 35 años (2.45%) a 64 años (2.49%), mientras que la de niños, de cero a nueve años, decrece en lugar de crecer e igualmente es relativamente pequeña la tasa de crecimiento de la población de 10 a 17 años, al compararse los resultados censales de 2002 y 2010.
“Esto es importante porque el grueso de la población que crece es la de 35 años o más, que llegó a representar alrededor de 34.9% en 2010, cuando era apenas de 31.5%, lo que significa que los dominicanos estamos envejeciendo”, resaltó el ministro.
Los resultados definitivos del XI Censo Nacional de Población y Vivienda revelan que la población de cero a nueve años cae, pues representaba un 22.7% en 2002 y a 2010 19.4%.
En otro orden los datos revelan que La Altagracia es la provincia de mayor crecimiento poblacional debido quizás a la migración atraída allí por el turismo, luego Santo Domingo (3.29%), Santiago, Distrito Nacional, San Cristóbal y La Romana.
El funcionario resaltó el caso de San Cristóbal, cuyo crecimiento poblacional se relaciona con la proximidad con la zona metropolitana del Distrito Nacional que también arrastra mucha migración.
Las provincias con mayor población son Santo Domingo, el Distrito Nacional, Santiago, La Vega, Puerto Plata, San Pedro de Macorís, Duarte, La Altagracia, La Romana, San Juan y Espaillat, a las que pueden agregarse Azua y Barahona.
Montás agradeció a Taiwán la cooperación con el censo, al BID, a los organismos internacionales de cooperación y financiamiento, a la Comisión Nacional Censal, a las entidades del sistema estadístico nacional, a la ONE y a todos los trabajadores censales.
Tactuk, el director de Estadística, destacó que los resultados censales son la herramienta básica para lapuesta en ejecución de la recién promulgada Ley Orgánica de Estrategia Nacional de Desarrollo y el Sistema Estadístico Nacional.
Recordó que las estadísticas son ejes transversales que permiten a los tomadores de decisiones el diseño de políticas públicas que fortalecen los sistemas democráticos y medir los avances económicos y sociales.
“Las nuevas y crecientes demandas de información que exige el desarrollo social y económico siguen constituyendo importantes desafíos que requiere nueva visión del rol de los censos y del compromiso de realizarlos con calidad y eficiencia”, dijo.