Asunción (PL) La conversación se desarrolló en el marco del reciente
Seminario sobre el impacto de las políticas sociales en los países
integrantes del Mercado Común del Sur (Mercosur), convocado por esa
instancia conjuntamente con el gobierno paraguayo y realizado en esta
capital. <br>
Fue una reunión a la cual asistieron ministros y altos funcionarios de
los gobiernos miembros del bloque, además de especialistas, académicos,
representantes de organizaciones sociales y dirigentes sindicales y
campesinos, entre otros.
Al momento de iniciar la entrevista, ya el ministro de Asistencia Social
de Paraguay,Hugo Ritcher, había subrayado la importancia del momento
vivido por América Latina tras conseguir lo que describió como bases
conceptuales comunes para la ejecución de las mencionadas políticas
sociales.
Ritcher saludó el retorno del Estado, en las naciones con gobiernos
progresistas, como articulador de esas acciones para proteger los
derechos de quienes fueron despojados de ellos,
Hay que lograr el apoyo social y político para romper las estructuras
que están al servicio del despojo, puntualizó el ministro, y se
pronunció por una integración válida mediante la inclusión social.
Por su parte, la viceministra de Asistencia Social de Argentina, Inés
Páez, esgrimió la necesidad de la voluntad política y de un cambio que
tenga en su centro a la gente como preocupación principal y llamó a
aplicar militantemente programas a favor de los pobres.
En el mismo foro, la ministra de Acción Social y Lucha contra el Hambre
de Brasil, Tereza Cardoso, planteó que no sólo con el crecimiento
económico se reduce la pobreza, pues debe crearse una agenda de
derechos para la población.
Al hablar con Prensa Latina, el uruguayo Christian Adel Mirza, director
ejecutivo del Instituto Social del Mercosur, afirmó que el evento había
nacido de una idea del presidente paraguayo, Fernando Lugo, quien
planteó un análisis profundo sobre el tema.
La invitación a los participantes planteó intercambiar sobre los avances
alcanzados en la región tras casi una década de transformaciones
determinadas por la presencia en Suramérica de gobiernos dispuestos a
llevar adelante procesos integracionistas y populares.
Desde luego que hay grandes retos, pues el futuro inmediato está teñido
por una crisis internacional, la cual Europa y Estados Unidos no
lograron conjurar y, sin embargo, América Latina pudo enfrentar bien,
afirmó Mirza.
Evocó un informe del año 2010 de la Comisión Económica para América
Latina y el Caribe (Cepal) que destacó las llamadas políticas
anticíclicas puestas en marcha por los Estados del Cono Sur del
continente.
Ellas fueron en sentido contrario a lo que se hacía en la década de los
noventas, época en que realmente beneficiaban apenas al capital
financiero, a las grandes industrias, pero no a la población, sentenció.
Manifestó que, al contrario, su puesta en marcha por los Ejecutivos de
corte progresista representaron un incremento del gasto social y de los
esfuerzos para enfretar la pobreza y la extrema pobreza.
Para el alto funcionario del Mercosur, los proyectos de ese bloque, al
igual que los de Unasur, trascienden la subregión y buscan cambios
efectivos en el modelo de desarrollo económico y social para lograr
políticas económicas dialogantes con las sociales.
La solución de los desafíos es profundizar las transformaciones
iniciadas y reconfirmar un sistema de protección social que incluya a
toda la población sin excepción, subrayó.
Tras una breve pausa en el intercambio, el tema de la integración latinoamericana surgió con fuerza:
La integración, djo Mizra, es para nosotros un arma vital, un
instrumento que une a los gobiernos, pero sobre todo a los pueblos y el
Instituto, como un órgano oficial del Mercosur, la promueve, no sólo
desde los aspectos económico y mercantil, sino también cultural.
Y agregó rápidamente:
Se trata de una integración verdadera, con elementos sustentados en este
proceso que estamos protagonizando todos, la cual permita encontrar a
una América Latina mucho más fuerte, única forma para lograr la
felicidad de sus pueblos.
Al mostrar su desacuerdo con las campañas que se hacen acusando de
proteccionistas a países latinoamericanos, recordó como un verdadero
ejemplo de proteccionismo el protagonizado por Estados Uidos y Europa
desde hace muchas décadas.
Lo que se está haciendo es encadenar entre sí a las empresas
genuinamente nacionales con los sectores populares, quienes sostienen
realmente los procesos de desarrollo y quiero destacar políticas como
las de transferencias monetarias, un instrumento eficaz para superar la
pobreza, articuladas con acciones a favor de la salud gratuita y la
educación, recalcó.
El tiempo se termina, pues el desarrollo del plenario llama al entrevistado y sólo permite una afirmación final:
Estoy convencido de que hay un modelo feneciendo, que está caducado,
efectivamente en crisis prolongada, y es hora de cambiarlo por un
sistema de producción, distribución y consumo para lograr un desarrollo
humano con valoración de la dignidad humana.
*Corresponsal de Prensa Latina en Paraguay.