<p style="font-weight: bold;">1 de junio 2012.-La simulación de que alguien de la familia habría sufrido un accidente o
que se habría obtenido un premio en un concurso de televisión, eran los
anzuelos utilizados por una banda, dirigida por un recluso para estafar a
ciudadanos.
La Policía Nacional ha informado este viernes el desmantelamiento de la
misma al apresar a tres mujeres y un hombre, en una nota en el que señala que
quien dirigía la banda es un recluso condenado a 30 años y que guarda prisión
en la cárcel de La Victoria.
Dijo que los detenidos son Alejandro
Feliz Soto (Bombon y/o El Topo), Gissel Lachapell (Jeimi), Isabel Esmirna Urbán
Ramírez, (Sugey) y Maritza Feliz, quienes operaban en coordinación con el
recluso Ernesto Alcántara Martínez (Capital), quien cumple una condena de 30
años en La Victoria. Este último es concubino de María Alejandra Pérez Feliz,
quien también formaba parte de la banda, pero se encuentra prófuga.
De acuerdo al parte policial a los integrantes
de la banda se les atribuye haber obtenido grandes ganancias al engañar
ciudadanos a los que realizaban llamadas telefónicas para alertarlos de
accidentes falsos en el que estaban involucrados algún familiar, y que para
resolver la situación debían entregar prendas, laptop y dinero en efectivo.
Las estafas eran materializadas, además, mediante
la modalidad de hacer creer a las víctimas que habían sido ganadores de
supuestos concursos, y que para obtener el premio debían desembolsar
determinada cantidad de dinero.
La institución del orden explicó que el
grupo logró sustraer mediante engaño computadoras, prendas preciosas, y
una caja fuerte de la vivienda de la señora Luisa Morillo, cuando engañaron a
la doméstica diciéndole que ésta habría sufrido un accidente.
También llamaron a la casa del señor Romel
Jael Germán y al hablar con su hija menor de edad y la doméstica, hicieron
creer que éste había tenido un accidente y matado a una niña, por lo que le
pidieron que buscaran en la habitación dinero en efectivo, o prendas
preciosas, para ayudarlo a obtener su libertad.
Al no encontrar dinero las víctimas del
engaño buscaron una laptop, seis pasaportes dominicanos con visa norteamericana,
lo cual la doméstica entregó a un desconocido en la calle Américo Lugo.
La Policía estableció que Bombón y/o El Topo
es la persona que recibe los artículos y está siendo identificado por los
afectados; en tanto que Jeimi es quien se encarga de quemar todos los
documentos, tales como pasaportes y matriculas, entre otros, para no dejar
evidencia.
En tanto que Sugey se encargaba de ocultas los electrodomésticos y
las computadoras Laptops, para luego venderlas, mientras que Maritza es la
propietaria de la casa donde los miembros de la banda se reparte el dinero
obtenido fruto de los engaños.