La historia de la República Dominicana registra inmensidad de hitos que nos obligan a dirigir la miradahacia ellos y detenernos para prestarles el debido respeto. Los primeros tres meses del año, como una componenda de la historia, nacieron los tres padres de la Patria. Abril, nos trae la guerra patria, en la que nuestro pueblo demostró una vez mas su bravura quisqueyana.
Mayo, además de ser el mes de las flores, es el me de la libertad, por el ajusticiamiento del tirano que sirvió de punto de inicio al renacimiento de la democracia y la libertad.
En Junio, por su parte, nacieron importantes dominicanos y dominicanas: El 6, de 1912, nació "La reina del tecnicolor": África María Gracia Vidal: nuestra María Montés; el 11, de 1932, vio la luz el Coronel de Abril, Francisco Alberto Caamaño Deñó, que cumplió este año su 80 aniversario.
Junio cierra con broche de oro. El 29 nos dio al inmenso Pedro Henríquez Ureña, y el 30, vio la luz el profesor Juan Bosch Gaviño.
Pero en junio también se conmemora un acontecimiento al cual nuestra universidad le dedica este acto de investidura, que es el acto número 12 que organiza nuestra Institución en estos seis primeros meses, en el que se gradúan 447 profesionales, con lo que suman 4,958 los investidos en 2012.
La conmemoración a la que me refiero es la Gesta Patriótica del 14 de junio de 1959, en la que un grupo de soldados con una composición plural desde el punto de vista político, ideológico, social, religioso y racial, provenientes de distintas naciones como Cuba, Venezuela, Puerto Rico, España, Norteamérica y Guatemala, bajo el mando de Enrique Jiménez Moya y cobijados en el Movimiento de Liberación
Dominicana (MLD), desembarcaron por Constanza, Maimón y Estero Hondo, con la meta de liberar nuestra nación de la tiranía, el yugo y la opresión.
Esos soldados, como dice el himno que posteriormente se escribió en su honor, ”llegaron llenos de patriotismo, enamorados de un puro ideal.
Y con su sangre noble encendieron la llama augusta de la libertad. Su sacrificio que Dios bendijo la Patria entera, glorificará Como homenaje, a los valientes que allí cayeron por la libertad”.
Es el “14 de junio”, una “gloriosa gesta nacional” protagonizada por “mártires están en el alma popular”.
Mártires de la gesta y posteriores a ella como las “Hermanas Mirabal, heroínas sin igual” cuyo “grito vibrante”, se convirtió en el “alma de la Patria inmortal”.
Los héroes del 14 de junio llegaron llenos de patriotismo y con sus mochilas colmadas de proyectos de transformación de la sociedad dominicana. Esas transformaciones estaban contenidas en su Programa Mínimo de cambios políticos, económicos y sociales.
Los cambios políticos procuraban Derrocar el régimen dictatorial de Rafael Leónidas Trujillo Molina; establecer un gobierno provisional, convocar una Asamblea Constituyente elegida por medio del sufragio universal, y derogar toda la legislación antidemocrática de la tiranía.
En lo social, los expedicionarios incluían en su plataforma de gobierno, implantar una amplia Reforma Agraria, reformar la Ley de Tierras, garantizar la libre organización de la clase obrera y campesina, iniciar una campaña de alfabetización, reformular integralmente la enseñanza y establecer un amplio sistema de seguridad social.
Las transformaciones económicas del programa incluían impulsar la economía en sus múltiples aspectos, desarrollar y proteger la industria nacional, expropiar en favor del Estado las industrias y propiedades del tirano y su familia, revisar todas las concesiones hechas por la tiranía en favor de capitales nacionales y extranjeros, reformar el sistema tributario y asegurar posibilidades de trabajo a la población.
La influencia internacionalista del movimiento le permitió incluir un componente internacional al programa, en el que se proponía respaldar el ejercicio continental de la democracia representativa, la convivencia pacífica, la ayuda mutua, fomentar las mejores relaciones con los demás pueblos basadas en la comprensión, el respeto, la igualdad jurídica de los estados y la libre determinación de los pueblos. Hoy, después de 53 años de aquella epopeya que constituyó para los dominicanos una campanada con la cual se despertó la conciencia colectiva necesaria para construir una sociedad sobre la base de la libertad, la justicia social y la democracia participativa, siguen teniendo vigencia muchos de los puntos contenidos en ese programa mínimo.
Temas tan importantes como la alfabetización y la reforma integral del sistema educativo dominicano son tareas aún pendientes que deberían ser puestas en primer plano por la sociedad dominicana, sobre todo, por el nuevo gobierno que se inaugurará el próximo 16 de agosto.
Poner énfasis en la educación es rendir tributo a los héroes del 14 de junio, a Caamaño, a Pedro Henríquez Ureña, y a los maestros y maestras, actores fundamentales del proceso de aprendizaje, a quienes se dedica el 30 de este mes su día especial.
Es el momento de honrar también a Juan Bosch, retomando los postulados educativos de la Constitución de 1963 en la que se establecía que “por su trascendencia social, el magisterio queda erigido en función pública”, lo que implica que “los Poderes Públicos se hacen responsables de la elevación del nivel de vida de cada maestro, de proporcionarle los medios necesarios para el perfeccionamiento de sus conocimientos, así como de la tutela y salvaguarda de su dignidad, de manera que este pueda consagrarse al ejercicio de su elevada misión sin presiones económicas, morales, religiosas o políticas”.
Permítanme ahora referirme a la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente que tuvo lugar el pasado 5 de junio y a La próxima Cumbre de la Tierra Río+20, que se celebrará del 20 al 22 del presente mes en Río
de Janeiro, Brasil, llamada oficialmente Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sustentable, la cual se realiza a la distancia de 20 años de la primera cumbre realizada en la misma ciudad en 1992.
En esta Cumbre, las Naciones Unidas invitan a los Estados, la sociedad civil y a los ciudadanos a “sentar las bases de un mundo de prosperidad, paz y sustentabilidad”.
Estos dos acontecimientos son ocasión propicia para recorder la necesidad de que nuestro pais asuma una acción mas enérgica en la protección de zonas frágiles, revise el mecanismo mediante el cual se hacen las concesiones para la
explotación minera, a fin de evitar la destrucción de nuestros ecosistemas costeros, ámbitos de montaña, nacimientos y cursos de ríos, así como la contaminación del suelo, el aire y el aguas.
Es el momento también de asumir uncompromiso colectivo con la educación ambiental que permita la construcción de una ciudadanía responsable, capaz de asumir la tarea de frenar y revertir el deterioro ambiental.
Coherente con ese compromiso, la UASD esta inmersa en una profunda reforma curricular tendiente a cumplir el mandato misional de “formar críticamente investigadores, profesionales y técnicos en las ciencias, las humanidades y las artes, necesarios y ficientes para coadyuvar a las transformaciones que demanda el desarrollo nacional sostenible”.
Tenemos tambien en ejecución el programa SOL, (Silencio, Orden y Limpieza), que procura incorporar una cultura compartida de defensa y preservación del medio ambiente.
Precisamente, ese programa tiene este viernes 15 y sábado 16 su V jornada, con la cual la UASD aspira que cada funcionario, profesor, empleado y estudiante se convierta en un ECOAGENTE,
promotor de un desarrollo pertinente desde la perspectiva ecológica y social, y en un creador de soluciones en su ámbito del saber y en su quehacer cotidiano, en este año que ha sido definido por el Consejo Universitario como el “Año del Fortalecimiento de la Calidad en la Gestión Universitaria”.
Graduandos y graduandas, concluyen hoy ustedes la primera etapa de su formación profesional. Tienen en los héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo y en los valores con los que han sido formados en esta universidad, las herramientas fundamentales para que les sirvan como rieles que les guíen en el transcurso de sus vidas.
La sociedad dominicana que contribuyó a formarlos, espera mucho de ustedes; sobre todo, espera que sean hombres y mujeres de conducta ejemplar, amantes de la convivencia pacifica, defensores de la igualdad, la verdad, la libertad, la equidad y la justicia; que sean responsables, tolerantes y solidarios y que en su vida profesional se desempeñen con transparencia.
La sociedad espera de ustedes que se abstengan de buscar el éxito económico al margen del servicio, niéguense a procurar el progreso individual sin honestidad y resístanse a detentar el poder social o político sin dignidad..
Hoy finalizan sus estudios de grado, pero no olviden nunca, que su alma mater, que es el Alma Mater de la Patria, siempre tendrá en su regazo el lugar que ocuparon desde que ingresaron a ella y que los recordará como su madre nutricia.
Recuerden siempre que miles de jóvenes como ustedes, provenientes de lugares remotos del país y de todos los estratos sociales, sobre todo, de estratos humildes, necesitan su apoyo para que alcancen también las metas que ustedes han alcanzado hoy.
Deseo para todos ustedes éxito en sus respectivas profesiones, y que junto a sus seres queridos, disfruten de abundante salud y larga vida.