23 de Junio del 2012.-El presidente Leonel Fernández regresó la noche de este sábado al país, tras participar en la Conferencia de las Naciones Unidas (ONU) sobre el Desarrollo Sostenible (CNUDS), conocida como Río+20, la cual fue organizada por el gobierno de Brasil y esa organización internacional.
El mandatario llegó a las 7:20 minutos, en un vuelo privado por el Aeropuerto Internacional de las Américas, acompañado de los ministros de Medio Ambiente, Ernesto Reyna; de Economía, Planificación y Desarrollo, Juan Temístocles Montás y de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, así como del director de Información, Prensa y Publicidad de la Presidencia, Rafael Núñez y el jefe del Cuerpo de Ayudantes Militares, general Héctor Belisario Medina y Medina.
El jefe de Estado, fue recibido en la terminal aérea por el ministro de las Fuerzas Armadas, teniente general Joaquín Virgilio Pérez Feliz; el jefe de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), general Rolando Rosado Mateo; los directores de la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMET), José Aníbal Sanz Jiminián; de Comunidad Digna, Juana Sánchez y del Instituto Postal Dominicano (INPOSDOM), Modesto Guzmán, respectivamente, así como ; la administradora del Instituto de Auxilios y Viviendas (INAVI), Maritza López de Ortiz, entre otros funcionarios.
En la Cumbre, el Presidente de la República participó en los diferentes paneles que se desarrollaron y pronunció un discurso ante más de cien mandatarios, jefes de Estado y de gobierno que estuvieron en el evento.
Fernández planteó que para evitar la repetición de la crisis económica y financiera global en el sistema bancario, hay que aplicar reformas y regulaciones en los mercados de capitales.
En ese orden, indicó que el país acudió a la cita de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible con la clara conciencia de que sólo hay una manera de salir airoso en la búsqueda de una solución a los desafíos del desarrollo.
El mandatario señaló que ha habido grandes resistencias a las reformas, y que por esa razón no debe extrañar que recientemente dos importantes instituciones financieras se hayan visto afectadas por la continuación de prácticas que ponen nuevamente en riesgo la seguridad de los bancos y la estabilidad del sistema financiero internacional.