<p style="font-weight: bold;">No
soy quién para trazarle pautas a nadie, pero siento respeto por mí mismo y por
mis compañeros y compañeras, por los hombres y mujeres que lo dieron todo
durante la campaña electoral para que Hipólito Mejía y el PRD llegaran al
poder.
Si
Miguel Vargas sabe contar, que conmigo no cuente.
Si
Hipólito Mejía negocia con Miguel Vargas ignorando la traición de que fue
víctima, que no cuente conmigo.
Si
la “negociación” implica un borrón y cuenta nueva, que nadie en el PRD cuente
conmigo.
No
apoyaré una paz sin principios, sin valores éticos-morales.
No
soy quién para trazarle pautas a nadie, pero siento respeto por mí mismo y por
mis compañeros y compañeras, por los hombres y mujeres que lo dieron todo
durante la campaña electoral para que Hipólito Mejía y el PRD llegaran al
poder. Entre ellos me encuentro. Hice hasta lo imposible para lograr el
triunfo. Miguel Vargas y su grupo de traidores hicieron lo imposible para que
Hipólito y el PRD no ganaran. Y eso no lo perdono. ¡Ni lo perdonaré nunca!
He
tratado de ser coherente toda mi vida. Lo que digo o escribo no se divorcia de
lo que hago.
No
le pongo precio a mi cabeza, ni a mis ideas. No hipoteco, ni alquilo, mis
valores éticos. No tengo religión. Aunque me avergüenzo a veces, simpatizo por
los Leones del Escogido en el béisbol local, por los Ángeles Lakers en
baloncesto. Izquierdista marxista-leninista, pensamiento Mao TseTung desde que
tengo uso de razón política. Miembro del Comité Ejecutivo Nacional del PRD
desde hace algunos años. Amante de la libertad y la justicia hasta morir.
No
perdono la traición. (Los traidores no pagan ni con la muerte)
Decía
el padre de la patria, Juan Pablo Duarte (para quienes no lo saben) que
“mientras no se escarmiente a los traidores como se debe, los buenos y
verdaderos dominicanos seremos siempre víctima de sus maquinaciones”-
A
mis hijos suele decirle, una y otra vez, que la lealtad es un valor moral innegociable.
El
Partido Revolucionario Dominicano debería gobernar el país durante los próximos
cuatro años con Hipólito Mejía de presidente de la República. Múltiples
factores impidieron el triunfodel PRD,
entre los que se destacan el fraude electoral, la inversión millonaria del
gobierno para la compra de cédulas y la abstención, que solo en la capital fue
de un 52 por ciento. Más de 50 mil millones de pesos del presupuesto nacional,costó la “elección” de Danilo Medina. El Estado, que antes había sido un factor para
que Danilo no ganara la lucha interna de su partido, ahora lo fue para que se
impusiera como presidente.
A
ese elemento fundamental, habría que sumarle los errores del candidato y del comando de
campaña. Pero fundamentalmente la traición de Miguel Vargas y su grupo. Durante
toda la campaña Miguel y su pequeño grupo trabajaron para que Hipólito no
ganara las elecciones.Miguel fue, y
sigue siendo, un aliado de Leonel para destruir, desarticular o dividir al PRD.
Tanto es así, que los asesores políticos de Leonel, son los asesores de Miguel.
Desde
la firma del “Pacto de las Corbatas Azules”, violando los estatutos y
desconociendo la autoridad de la Comisión Política y del Comité Ejecutivo
Nacional,Miguel Vargas viene actuando
de espalda a los intereses del partido que ilegalmente preside.
No
acepto ramos de olivo de traidores; no negocio con traidores, ni con vende
patria. No me arrodillo ante el dinero por mucho que sea.
Si
Miguel Vargas sabe contar, que no cuente conmigo.
Los
que quieran negociar y unirse a los traidores para garantizar la “unidad” del
PRD, que tampoco cuenten conmigo. No estoy en venta. ¡Que conste!